El reporte surgió semanas después de que las autoridades antimonopolio europeas multaron al gigante de internet por un récord de 4.340 millones de euros y ordenaron que dejara de usar su sistema operativo para bloquear rivales.
El regulador antimonopolio de Brasil está evaluando si inicia una investigación a Google por supuestos abusos en su sistema operativo para teléfonos celulares, dijo el presidente de la agencia gubernamental Cade en una entrevista publicada el miércoles en el diario local Valor Economico.
Los comentarios de Alexandre Barreto se difunden apenas semanas después de que las autoridades antimonopolio europeas multaron al gigante de internet por un récord de 4.340 millones de euros (4.910 millones de dólares) y ordenaron que dejara de usar su popular sistema operativo Android para bloquear rivales.
Según el reporte, Barreto señaló que Cade decidirá si investiga formalmente a la compañía estadounidense, de la matriz Alphabet Inc, dependiendo de los resultados de una evaluación que está llevando a cabo.
“Lo que estamos haciendo ahora es analizar la decisión de la Unión Europea para determinar si tenemos fundamentos para actuar aquí”, dijo Barreto en la entrevista.
Google no quiso hacer ningún comentario sobre el caso brasileño.
Sin embargo, en una publicación de blog tras la decisión de la UE, el presidente ejecutivo Sundar Pichai dijo que los teléfonos con sistema Android compiten con iOS, y que el dictamen no consideraba cuántas opciones brinda Android a los fabricantes de teléfonos y operadores de redes móviles.
Android de Google, que los fabricantes de dispositivos usan gratis, opera en un 80% de los teléfonos celulares de alta gama del mundo, según la firma de investigación de mercado Strategy Analytics.
La UE consideró que la conducta ilegal de Google databa del 2011 e incluía obligar a los fabricantes a preinstalar Google Search y su navegador Chrome junto con la tienda de aplicaciones Google Play en sus teléfonos con Android, además de pagarles por preinstalar sólo Google Search y bloquear el uso de sistemas rivales.
Google ha dicho que apelaría el fallo europeo.