La plataforma de remesas internacionales, que se ha asociado a compañías como Accendo Banco y neobancos, procura ser una alternativa superior en comparación a sus competencias como Swift.
Como para varias fintech, 2020 fue un año agitado para la singapurense Nium. Estuvo marcado por su ronda de inversiones liderada por Visa y BRI Ventures por un monto no revelado, como también por su expansión en varios países de la región y anuncios llamativos, como su alianza con neobancos y el Banco Accendo de México para comenzar a ofrecer servicios de pagos internacionales a sus clientes.
Al inicio de sus operaciones en 2014, Nium ofrecía solución de remesas internacionales. Actualmente, Brayan Peralta, vicepresidente para el desarrollo de negocios para América Latina de Nium, denomina a la plataforma como un “banco en una caja”, que permite a sus clientes elegir de un menú aquellas soluciones que más se ajustan a sus necesidades. La compañía ya distribuye más de US$ 6 mil millones en interacciones financieras y, a través de sus APIs (tecnología que permite a los sistemas comunicarse de manera rápida) realizan más de un millón de llamadas al día.
Nium desarrolla soluciones de servicios financieros en tres verticales principales. La primera tiene que ver con soluciones de pagos internacionales que permite reducir la fricción en lo que son las ofertas actuales. Por ejemplo, su sistema permite realizar pagos entre empresas de una empresa que tiene que pagar a algún otro país del mundo, hacer desembolsos de una empresa que tiene que distribuir la nómina internacional para sus empleados o incentivos, o realizar pagos entre personas.
“Todo eso lo hacemos utilizando tecnología para reducir fricción en tiempo, el proceso sea más eficiente y más rápida, pero también para entregar transparencia. No solo transparencia desde el punto de vista de información disponible en cada punto de la transacción, pero también en los costos, para que cada persona o empresa sepa exactamente cuándo va a llegar el dinero, cuánto le va a llegar y cuánto le cuesta antes de tomar la decisión de transacción”, dice Peralta a AméricaEconomía.
Peralta destaca además el estatus de institución regulada en todos los países donde opera, lo que le permite operar con licencias financieras y trabajar con marcas como Visa y Mastercard para emitir productos financieros, como la dispersión de fondos a través de una tarjeta para empresas que utilizan sus servicio. Finalmente, su tercer vertical tiene que ver con los cobros internacionales, lo que lleva a una empresa tener un mecanismo de colección más eficiente que la típica alternativa vía Swift u otros medios que faltan transparencia, toman más tiempo o tienen costos mayores.
- ¿Cuáles son las diferencias con servicios que ofrece una entidad más tradicional bancaria? ¿Por qué las empresas deberían confiar en Nium?
- Lo interesante de las soluciones que traemos es que están disponibles para distintos segmentos de clientes. Nosotros como fintech no estamos limitados a trabajar solo con bancos o fintechs, sino que tenemos dentro de nuestro portafolio de clientes a bancos tradicionales que identifican una necesidad de mejorar su propuesta de valor, por lo que usan nuestros servicios para reducir fricción en soluciones de pagos internacionales para sus clientes personales, su pequeña y mediana empresa o corporativos, como también trabajamos con fintechs que están revolucionando estos mercados.
¿Qué confianza puede tener una entidad bancaria, fintech o financiera a una entidad como Nium? Desde nuestro inicio entendimos que esto no es un tema de tecnología, sino un tema de soluciones. Es decir, no basta con tener la capacidad de generar una transacción de un punto A a un punto B, sino que necesito que esa transacción ofrezca seguridad y confianza.
Entonces, en primer lugar, necesitamos ofrecer seguridad de información a través de una robusta tecnología para que los ataques penetren nuestros sistemas y para proteger la información e integridad de las transacciones. Pero también es importante la parte de cumplimiento, ya que nuestra existencia depende de que nuestros clientes sientan la confianza de que pueden destinar una transacción. Y esto lo evidenciamos con nuestras licencias, ya sea de transmisión de dinero o licencia bancaria, de alrededor de 40 jurisdicciones. A pesar de ser una empresa joven se nos han otorgado licencias porque nos hemos sometido a verificación de nuestros procesos e integridad.
- ¿Trabajan el servicio de emisión de tarjetas? ¿Por qué los bancos que ya son emisores emitirían tarjetas con ustedes?
- Vamos con la primera parte: trabajamos con bancos y entidades financieras para ofrecer servicios de pagos internacionales. Lo cual te queda claro el beneficio de utilizar a nosotros, incluso en los bancos que hoy tienen a Swift como su canal dedicado, pero ahora pueden contar con un canal alternativo vía Nium que le permite crear una mejor experiencia a sus consumidores y protegerse de la competencia que cada vez más están entregando mejores servicios.
Ahora, sobre el tema de la emisión de tarjetas, nosotros somos en algunas jurisdicciones bancos o una entidad que permite manejar una operación bancaria. En esas jurisdicciones, obtuvimos la licencia de que Visa, por ejemplo, para emitir una tarjeta. ¿Qué tipo de entidades se acercan a nosotros? Por ejemplo, tenemos un proyecto en Asia con una empresa marítima, que tiene barcos de transporte, carga y de pasajeros y que emplea colaboradores de muchos países. Su principal problema es la distribución de nómina y el manejo de esa nómina por parte de sus empleados, quienes necesitan enviar remesas a su país de origen.
Entonces, convertimos a esa empresa marítima en un fintech porque tenemos dentro del mismo grupo de ofertas nuestra licencia bancaria que nos permite emitir la tarjeta Visa, licencia para la transmisión de dinero, tecnología para facilitar pagos y operaciones dentro el barco y acceso a esa tecnología fuera de barco, como transacciones sin contacto, transferencia entre los mismos colaboradores y las transferencia a sus parientes. Ese barco se convirtió en un fintech gracias a las soluciones de Nium.
- Me has comentado servicios B2B. ¿También tiene servicios B2C?
- Claro. Nosotros tenemos clientes en Brasil, por ejemplo, una empresa que necesita pagar a un freelancer que utilizó en Estados Unidos puede pagar a través de nuestra plataforma a su cuenta comercial o personal. Y más, si un padre brasileño tiene a su hijo en Europa y quiere depositarle a su cuenta bancaria de ese país, también lo puede hacer con modalidad C2C. Por otra parte, tenemos clientes de Europa, Asia y Estados Unidos mandando esas transacciones a América Latina y nosotros somos el distribuidor.
Cuando piensas en Nium piensas lo siguiente: operamos ya en seis continentes, con distribución en más de 100 países y el 60% de nuestras transacciones se paga en 15 minutos o menos. Piensa un cliente en Brasil que tiene necesidad de enviar dinero a China, pero luego a Canadá y después a Australia. El consumidor está típicamente acostumbrado a estos servicios solo a nivel doméstico, pero piénsalo ahora una empresa mediana que tiene que pagar $ 20 mil euros. Imagínate la propuesta de valor: si antes te tardabas entre cinco a siete días enviar dinero vía Swift, ahora el mismo banco te ofrece enviar el dinero el mismo día, lo que te ahorra tu preocupación por el valor del cambio de pesos a euros futuros y si llegó o no el dinero a tu destino final.
Brayan Peralta, vicepresidente para el desarrollo de negocios para América Latina de Nium
- Hasta ahora habían actores oligopólicos que controlan los pagos internacionales. ¿Cómo está afectando este mercado de pagos internacionales con nueva competencia y nueva tecnología?
- Al final del día, somos nosotros como clientes los que estamos beneficiándonos, porque tenemos más opciones innovadoras. El mercado de los pagos internacionales es tan grande, hay muchísimas fricciones y las oportunidades son tan importantes, que todas estas soluciones vienen es a mejorar toda la experiencia y dinamizar el mercado.
Pongamos como ejemplo lo que ha pasado en Covid. En todos los países del mundo se ha acelerado el acceso a servicios digitales no necesariamente porque los mercados o los clientes estaban listos, pero por una necesidad puntual. Mi madre en República Dominicana se vio con la necesidad de comprar en un supermercado en línea porque no quiso exponerse, lo que la llevó a entender que esa transacción tiene valor. Entonces, lo que vemos es que está pasando es lo que llamamos la democratización de las transacciones de pago.
- Con el surgimiento de nuevos jugadores, especialmente las big tech, hay una preocupación de que el mundo de los pagos concluya en un escenario de “winner takes all”. ¿Cuál es tu opinión?
- Para serte honesto, creemos que existen tantas oportunidades de traer mejorías sustanciales a los clientes, ya sean individuos o corporaciones, que vemos el mundo en color de rosas. Lo podemos medir en los movimientos fintechs en América Latina, que están saliendo con soluciones innovadoras no solo a nivel doméstico, sino a nivel internacional.
Piensa que ahora puedes iniciar una transacción en tu teléfono móvil, revisarla en tu computador personal y completarla en tu tablet. Cada vez más, estos ambientes son reales para las empresas, como también los son las oportunidades de moverse entre un ambiente al otro. No vemos que alguien se vaya a adueñar de estos espacios, sino más bien, es un mercado tan grande y hay tantas necesidades, que va a haber lugar para todos. Nuestro rol acá es crecer, dinamizar la competencia, incrementar el valor al cliente y disminuir la fricción a través de la tecnología.
- ¿Cuáles son los mayores obstáculos que ve Nium para lograr estos objetivos en América Latina?
- Todavía estamos en el proceso de desarrollo tecnológico. Por ejemplo, en muchos países el acceso a internet sigue siendo un reto, lo que contribuye a que la adopción se atrase. Entonces, aquí nuestro rol es preguntarnos qué hacer para facilitar la experiencia de los consumidores y cómo aprovechar las nuevas tecnologías, a medida que vaya incrementando el acceso a internet y el uso de teléfonos móviles, para que tengan sentido al cliente y les haga llegar beneficios tangibles.
Es decir, cómo pasamos de un cliente pasivo que usa redes sociales o email, a un cliente activo transaccional que inclusive genere negocios. Cómo hacemos para ayudar a las pymes a competir en un nivel más conveniente. Quizás por volumen no tienen la posibilidad, pero con empresas como nosotros, ayudándolos a resolver temas como el de los pagos internacionales, pueden expandir su mercado.
- ¿Cuáles son las posibles conclusiones de esta transformación del mundo de los pagos digitales? Blockchain, open banking, etc?
- Hay algo que no te mencioné: la apertura que se está dando en todos los segmentos. Hay oportunidades de desarrollo tecnológico, de mayor inclusión financiera, de temas regulatorios que es una evolución constante, es un movimiento que vino para quedarse. Si ves el nivel de éxito de algunas fintech en la región que son exitosos a nivel internacional, cuando vemos la apertura de gobiernos a revisar cómo apoyar a las fintech o impulsar el open banking, cómo motivan a las empresas a desarrollar nuevas soluciones para apoyar a las pymes, ves que es una tendencia a largo plazo y algo en constante desarrollo.
El tema ya no es si las transacciones digitales son una vía o no, sino que es la vía. Es la manera en que las empresas van a interactuar con sus clientes, en que los bancos van a ofrecer sus servicios financieros, en que las fintechs van a crecer y en que las entidades como nosotros vamos a traer soluciones al mercado.
- ¿Cuáles son los países de América Latina en el que están enfocados?
- La verdad es que América Latina es un libro abierto. Obviamente, siempre mencionamos los tradicionales como Brasil, México, Chile, Argentina, Colombia o Perú. Sin embargo, nosotros acabamos de lanzarnos al mercado con una fintech muy importante en el mercado costarricense llamado Teledólar.
Nuestro foco es democratizar todo lo involucrado a los pagos internacionales. Ver cómo nosotros podemos aportar un grano de arena en estas soluciones y, a la vez, generar valor. Estamos en un momento sumamente importante. Pero ojo, esto es resultado de la asimilación de las nuevas tecnologías y de la realidad fintech por parte de las instituciones existentes. Tú puedes comprobar que los jugadores tradicionales están asociándose con fintech o desarrollando sus propias soluciones para elevar el nivel de sus servicios.
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