La nave Progress M-27M iba a abastecer con agua y comida a la Estación Espacial Internacional (ISS).
Este miércoles operadores de vuelo rusos perdieron el control del Progress, un carguero espacial sin tripulación que iba a abastecer la Estación Espacial Internacional (ISS), y que se espera caiga en las próximas horas a la Tierra.
Hasta el minuto, los controladores de vuelo rusos han intentado restablecer dos veces la conexión con el carguero aunque sin éxito.
"Es imposible saber cuándo caerá exactamente a la Tierra, depende de mucho factores. Pero la caída se producirá en condiciones incontrolables", aseguró uno de los encargados.
Dentro de la nave, iba científico y productos de primera necesidad para la plataforma, como agua y comida. No obstante, su pérdida no supondrá un problema para los seis astronautas que están en la estación.
Los primeras fallas del Progress surgieron para su lanzamiento, este pasado martes, cuando los operadores rusos tuvieron problemas de transmisión y decidieron cambiar el plan de vuelo.
Sin embargo, en este minuto las autoridades aseguraron que la nave podría ser lanzada con éxito y se amarraría este jueves a la Estación Espacial Internacional. Algo que finalmente nunca ocurrió.
Estos cargueros especiales salen desde la tierra tres a cuatro veces al año, principalmente, para abastecer a la estación espacial. Posteriormente, salen de esta plataforma y caen y se queman en la atmósfera, por encima del océano Pacífico.