El invento tiene tal elasticidad que sus transistores funcionan incluso cuando éste se envuelve alrededor de un cabello humano, que tiene unos 50 micrómetros de espesor.
Científicos en Suiza anunciaron la creación de un chip electrónico tan flexible que podría envolverse alrededor de un cabello humano, una invención con potenciales usos médicos y comerciales.
La electrónica “puede ser transferida a cualquier objeto, superficie y tejido biológico, como piel humana y hojas de plantas”, según el estudio dirigido por Giovanni Salvatore, del Instituto Federal Suizo de Tecnología en Zúrich (ETH).
Según la investigación publicada en la revista Nature Communications, los transistores del chip pueden funcionar incluso cuando éste se envuelve alrededor de un cabello humano, que tiene unos 50 micrómetros de espesor.
La técnica para obtener este chip ultra-flexible implica construir un circuito electrónico en la parte superior de una especie de sándwich de capas de polivinilo ubicadas sobre una base dura. A continuación, la lámina de silicio se coloca en agua, la cual disuelve dos de las capas de polivinilo.
Lo que resulta es un circuito integrado en una liviana película de polímero, transparente y no soluble, llamada parileno, cuyo espesor es de sólo un micrómetro (o millonésima parte de un metro).
Este chip ultra-flexible puede tener usos médicos, por ejemplo, para controlar el glaucoma, un trastorno caracterizado por el aumento de la presión intraocular, indicaron los investigadores, que ya lo probaron en el laboratorio en un ojo artificial. La invención también tiene otras posibilidades de aplicación comercial, desde células solares flexibles hasta biosensores portátiles, señalaron.