Si bien Nokia abandonó en febrero del año pasado su plataforma para teléfonos inteligentes Symbian en favor del sistema Windows Phone, de Microsoft, se esperaba que Symbian represente por un tiempo una gran parte de las ventas de teléfonos inteligentes.

Helsinki. Los débiles reportes trimestrales de proveedores de circuitos integrados para Nokia provocaron el temor a una caída de las ventas de los teléfonos inteligentes más antiguos de la compañía finlandesa, derrumbando sus acciones 8%.

Si bien Nokia abandonó en febrero del año pasado su plataforma para teléfonos inteligentes Symbian en favor del sistema Windows Phone, de Microsoft, se esperaba que Symbian represente por un tiempo una gran parte de las ventas de teléfonos inteligentes.

Los proveedores de Nokia Texas Instruments, ST-Micro y ST-Ericsson pronosticaron el lunes por la noche una debilidad de sus negocios inalámbricos para el trimestre actual.

"Los tres han sido proveedores clave para los teléfonos antiguos de Nokia y ninguno de ellos tiene nada bueno que decir. La guía de negocios base de Texas Instruments para el primer trimestre fue especialmente alarmante", dijo Sami Sarkamies, analista de Nordea.

Texas Instruments pronosticó que las ventas de su negocio de telecomunicaciones de banda base, cuyo cliente principal es Nokia, caerían a alrededor de 75 millones de dólares este trimestre, desde los 279 millones de dólares en el cuarto trimestre.

ST-Ericsson, uno de los principales proveedores para Symbian, reportó una pérdida neta más profunda para el último trimestre y anticipó una ralentización significativa de las ventas para el comienzo del 2012.

Danske bajó el martes su recomendación para las acciones de Nokia a "vender", por expectativas de una baja de las ventas de los modelos antiguos de teléfonos.

En promedio, los analistas esperan que el 26 de enero Nokia reporte ganancias por acción para el cuarto trimestre de 0,04 euros, una baja de un 82 por ciento respecto del mismo período del año anterior, según un sondeo de Reuters.

Analistas esperan que Nokia pronostique una desaceleración en el mercado general de celulares, ante una economía mundial más débil que desincentiva a los consumidores a reemplazar sus aparatos.