La compañía ha intentado sin éxito durante años entrar en el mercado liderado por las emisoras Televisa y TV Azteca, aunque ha ampliado su programación online a través de su canal web gratuito, UnoTV.
Una decisión judicial mexicana ha dado un nuevo revés a la campaña del magnate de las telecomunicaciones Carlos Slim por obtener la aprobación del Gobierno para ofrecer servicios de televisión en el país, informó el miércoles el diario El Economista.
La decisión del tribunal significa que el gigante telefónico de Slim, Teléfonos de México (Telmex), tendrá que volver a presentar una solicitud para cambiar su licencia de explotación bajo la nueva administración del presidente Enrique Peña Nieto para incluir la televisión.
Funcionarios de Telmex, el principal operador de telefonía de red fija en México, no pudieron comentar inmediatamente sobre el reporte.
La compañía ha intentado sin éxito durante años entrar en el mercado liderado por las emisoras Televisa y TV Azteca, aunque ha ampliado su programación online a través de su canal web gratuito, UnoTV.
Bajo el gobierno de Felipe Calderón, cuyo mandato presidencial expiró el 1 de diciembre, la empresa estaba obligada a abrir su red a los competidores más pequeños, un mandato que Telmex ha dicho que ha cumplido.
Slim ya ofrece paquetes triples en la mayor parte de América Latina, que combinan internet, televisión y telefonía, pero su intento de hacer lo mismo en su país de origen sigue siendo difícil de alcanzar.
En México, Telmex es el principal proveedor de internet y servicios de telefonía fija, mientras que su firma matriz América Móvil domina el mercado móvil.
Reguladores mexicanos se acercaron el miércoles a establecer directrices para los cargos que los operadores de telecomunicaciones honorarios se cobran entre sí, un proceso que surgió de la voluntad de frenar el poder de Slim en el mercado de telecomunicaciones local.
Analistas del sector creen que Slim obtendrá eventualmente la aprobación de televisión.
Peña Nieto se ha comprometido a fortalecer la competencia en México, incluyendo la industria de las telecomunicaciones, pero aún no ha presentado un plan para lograrlo.