Se los contrata en la mayoría de los casos vía online, y el precio de los paquetes de ataques varían en función de las características, tiempo e inclusive país. Revisa los valores.

Cromo - El Observador. El ataque DDoS es de las más preferidas herramientas de los hackers. Desde Kaspersky Lab han analizado los servicios DDoS disponibles en el mercado negro tras detectar un auge notable de esta actividad en los últimos tiempos.

La empresa de ciberseguridad desveló cuánto se cobra por este tipo de servicios: un promedio de 18 dólares por cada hora de ataque. Pueden ganar desde cinco dólares por 300 segundos hasta 400 dólares en caso de bloquear un servidor durante 24 horas. Costos que parecen insignificantes, mientras que para la víctima supone pérdidas de miles o hasta millones de dólares; una realidad motivo de mucha preocupación.

En seguridad informática, un ataque de denegación de servicio (DDoS) ocurre cuando se lanzan múltiples ataques a un objetivo único. Este tipo de acciones se dirigen a los servidores de una compañía, afín de que la víctima pierda conectividad a su red por un período indefinido de tiempo.

A finales de 2016 varias empresas como Twitter, Spotify, Netflix, Tumblr, PayPal y el New York Times sufrieron sus estragos.

El investigador Denis Makrushin explicó (en un informe publicado) que como cualquier propietario de un negocio legítimo, los ciberdelincuentes desarrollan programas de fidelidad y de prestación de servicios al cliente.

Se los contrata en la mayoría de los casos vía online, y el precio de los paquetes de ataques varían en función de las características, tiempo e inclusive país. La competencia hace que los hackers suban o bajen el costo de sus servicios. Por ejemplo, en EEUU el mismo ataque puede salir más caro que en Rusia.

"Los organizadores de los servicios de DDoS que encontramos, al mismo tiempo que exponen las características de sus 'botnets', ofrecen a sus clientes una lista de tarifas según las cuales el comprador paga el alquiler de la capacidad de la 'botnet' por segundo", añadió Makrushin.

Un bot es un tipo de programa malicioso que permite a un atacante tomar el control de un equipo infectado. Los bots son parte de una red, botnet, compuesta por máquinas víctimas de todo el mundo. El artífice de la botnet puede controlar todos los servidores infectados de forma remota.

Según la tabla, el hacker cobra 60 dólares por tres horas de ataque, y unos 22 dólares por una hora. Los ataques gubernamentales significan un importante incremento en la tarifa, aunque no muchos se animan a hacerlos. La supervisión de los órganos de seguridad puede llegar a exponer sus botnets. De todas formas, algunos han encontrado maneras de traspasar los filtros estatales y por tanto hay muchas tarifas que sí incluyen este servicio.

Makrushin concluye que el costo de DDoS caerá en un futuro próximo, mientras que su frecuencia aumentará.