De acuerdo con las denuncias presentadas, se estima que el dinero defraudado por esta red ronda los 6 millones de euros en 1.336 actos delictivos, aunque los daños reales serán mucho mayores.
El gobierno y la justicia alemanes anunciaron que se ha desmantelado la mayor red mundial de robots destinada al fraude y al robo de datos en Internet tras una investigación de cuatro años en la que participaron investigadores de 41 países.
La Fiscalía de la ciudad norteña de Verden señaló en un comunicado que fueron incautados 39 servidores y cientos de miles de dominios, y precisó que se identificó a 16 personas sospechosas de participar en la dirección de la red en diez países, centrada en los clientes de bancos por Internet.
Sobre siete de esos sospechosos pesa ya una orden de prisión emitida por la Justicia, acusados de fraude y de constituir una organización criminal.
En tanto, el ministro alemán de Interior, Thomas de Maizière, mostró durante una rueda de prensa su satisfacción por el éxito de una operación "sin precedentes" contra las redes delictivas en el ciberespacio, según informó la agencia española Efe.
Los investigadores vinculan a los sospechosos con la infraestructura "Avalanche", dedicada al menos desde 2009 al "phishing" (el envío de correos fraudulentos para hacerse con datos privados de usuarios) y a campañas de spam (correos no deseados).
Según calculan, cada semana la red de robots podía enviar hasta un millón de correos con archivos dañinos o direcciones web fraudulentas a través de los cuales infectaban las computadoras de los receptores, que así pasaban a formar parte de la red "Avalanche".
Su objetivo principal eran clientes de bancos que hacían trámites online, quienes fueron estafados en un promedio de 5.000 euros cada uno, según la Fiscalía de Verden.
De acuerdo con las denuncias presentadas, se estima que el dinero defraudado por esta red ronda los 6 millones de euros en 1.336 actos delictivos, aunque los daños reales serán mucho mayores.
Sólo en Alemania la red consiguió controlar las computadoras de más de 50.000 víctimas.
En la investigación participaron además de Alemania, el FBI, el Departamento de Justicia estadounidense y autoridades judiciales de 39 países de todo el mundo.
La Fiscalía de Verden informó que los sospechosos identificados proceden de diez países diferentes por lo que no será posible llevarlos a todos ante la Justicia alemana ante la falta de acuerdos de extradición.