La multiplicación de antenas permite la realización de mayor cantidad de comunicaciones simultáneas, para que así no se congestione. Sin embargo, la gente no las quieren cerca de sus hogares.
El gobierno argentino evalúa la posibilidad de ofrecer a los operadores de telefonía móvil la utilización de las azoteas de edificios públicos para que coloquen antenas y permitir así elevar la calidad del servicio de comunicaciones móviles, según comentaron diferentes actores del mercado digital que participan en Barcelona del Congreso Mundial de Móviles.
Al término de las reuniones de reguladores y ministros, celebrada en el marco del Congreso, distintos referentes del ecosistema digital indicaron que una novedad que evalúa el Gobierno argentino es la de ofrecer a los operadores la utilización de los edificios públicos para la instalación de antenas.
Según fuentes que asistieron a las reuniones del Foro Ministerial, ésta fue una de las iniciativas consignadas por la delegación argentina al dar cuenta de las opciones que se encuentran en estudio para mejorar la perfomance del sector.
Este tipo de iniciativa ya se instrumentó en otros países de la región, como México.
Técnicamente la multiplicación de antenas permite la realización de mayor cantidad de comunicaciones simultáneas, de modo que no se congestione el servicio ni se corten los llamados.
Otro de los puntos sobre los cuales la delegación oficial argentina mostró interés fue la posibilidad de instrumentar una red mayorista que podría utilizar el espectro no asignado aún para servicios de 4G, a través de un operador privado, que vendería capacidad para que cooperativas y pymes de telecomunicaciones puedan dar servicios móviles. La delegación argentina que participa del Congreso de Móviles es encabezada por el ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad.
El modelo analizado fue el méxicano, que aún no está en funcionamiento y presenta varios "defectos" en cuanto a garantizar la competencia, según especialistas en regulación.
Además, Argentina, Brasil y Colombia fueron identificados por los integrantes de la asociación que nuclea a operadores y empresas dedicada al desarrollo de las comunicaciones móviles, GSMA, como los casos más importantes a asesorar y seguir en materia de regulación.
Según la entidad, en Argentina del total de usuarios de telefonía móvil, el 36% emplea servicios de banda ancha, 48% tiene cobertura pera no es usuario de banda ancha móvil y el 16% no tiene cobertura de banda ancha móvil ya sea 3G o 4G.
Esta brecha puede deberse tanto al precio del servicio, como a la falta de difusión sobre la posibilidad de utilizarlo, concluyó la entidad sectorial.
Avances del 4G
Argentina es uno de los países que más rápidamente adoptó la tecnología LTE (o 4G) en la región, dónde llega a un 10% de la base de usuarios, mientras que países como Chile, Colombia y Perú que iniciaron el despliegue con anterioridad, tienen un penetración del 18%, 13% y 8%, respectivamente.
Uruguay que comenzó la utilización de LTE (o 4G) en el año 2011, alcanzó un 49% de penetración.
Respecto a la tecnología 5G, uno de los temas centrales de la exposición y congreso realizado esta semana en Barcelona, el director de la consultora 5G Americas para América Latina y Caribe, José Otero, dijo que "no hay un estándar" definido por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT)
La experiencia del paso de 2G a 3G hizo que muchas empresas operadoras implementaran una tecnología (TDMA) que luego debieron levantar para migrar a GSMA. Ahora prefieren esperar a una definición de estándar para no repetir la experiencia. El cronograma previsto por la UIT ubica entre octubre del 2018 y febrero del 2020 la fase final de pruebas para la definición del estándar de tecnología 5G.