En Bolivia son varias las productoras de video que están usando drones en las filmaciones, logrando resultados interesantes, mientras que algunos devotos de la tecnología han optado por armar sus propios modelos a partir de Internet.
Las productoras audiovisuales en Bolivia viven un momento interesante. Hasta hace muy poco el poder contar con imágenes aéreas estaba reservado a aquellos que contaban con el presupuesto suficiente para alquilar un helicóptero o avioneta. Los drones, como se conoce a los vehículos aéreos no tripulados, han comenzado a ser utilizados en las filmaciones con notables resultados.
Campañas publicitarias como la impulsada por la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), el famoso spot televisivo Juan Reporte, o la campaña del teleférico que se construye en la ciudad de La Paz han usado con mucho éxito estos dispositivos, lo que se ha traducido en productos de mucha calidad que no tienen nada que envidiar a producciones de otros países de la región o los Estados Unidos.
Basados en principios similares a los helicópteros a control remoto, los drones están comenzando a ganar adeptos a todo nivel. Uno de los pioneros en el tema en el país y entusiasta de la tecnología, Alex Chipana, señala que los primeros drones que vio fueron a través de videos de internet y que de ahí siguió investigando. Poco tiempo después tomo la decisión de construir un prototipo él mismo.
“Compré los elementos en Internet después de calcular valores, características y costos, lo armé y el primer día voló”, explica orgulloso Chipana, quien está convencido de que el artefacto tiene muchas aplicac iones, además del campo audiovisual.
“Esta tecnología es nueva en Bolivia. Estos bichos pequeños pueden incursionar en áreas de desastres naturales o que signifiquen algún peligro para los seres humanos”, opina orgulloso de su prototipo casero que ya ha participado en filmaciones de conciertos, videoclips y tomas aéreas de la construcción del teleférico paceño.
Un mundo de posibilidades
En el último año, la producción audiovisual se ha apropiado de los drones como una herramienta de trabajo fundamental, ampliando el horizonte de posibilidades creativas de los trabajos que se realizan. Carmen Julia Navarro de la productora Ego Audiovisual está convencida de las bondades de este recurso.
“Los drones son una verdadera revolución para la producción audiovisual. Nos permite tener un punto de vista diferente, podemos tener imágenes
espectaculares sin tener que invertir mucho dinero”, explica Navarro.
(Crédito foto: Productora Alma Films)
Hasta antes de la llegada de esta tecnología el obtener imágenes aéreas sólo se lograba alquilando una grúa o un helicóptero, costos que muy pocos clientes y productoras podían solventar, además de que existían limitaciones técnicas que condicionaban el uso de ese tipo de tomas.
“Mayormente estos equipos se alquilan debido al costo de compra y el tiempo de aprendizaje que se requiere para operar un dron de manera adecuada y sobre todo útil para las filmaciones”, opina Santiago Loayza, de Alma Films, productora que ha realizado documentales en todo el país donde sí se han utilizado los drones específicamente diseñados para filmaciones.
Según explica Navarro, los costos de alquiler fluctúan entre los US$700 y US$1700, dependiendo de la complejidad del equipo; mientras que si se decide hacer la inversión y comprar un equipo propio los costos pueden subir hasta los US$15.000.
“El costo es lo de menos. Lo más importante es quien lo vuela. Son equipos altamente sensibles. El armado, el balanceo de las hélices y el vuelo demandan personas expertas. El dron tiene un equipo que permite mover la cámara hacia arriba y abajo, y combinando con el movimiento del equipo, consigue el ángulo deseado desde las alturas”, explica la productora.
Tecnología para todos
En criterio del ciberactivista y experto en temas tecnológicos, Mario Durán Chuquimia, el “boom” de los drones y sus aplicacion es en lo audiovisual es una muestra de los cambios que se han dado a nivel global en la gestión de información y acceso al conocimiento.
“Gracias al internet uno puede acceder a los diseños y los materiales para el desarrollo de este tipo de tecnologías y son los jóvenes quienes están investigando estas cosas, por lo que hay que alentarlos y desarrollar su creatividad. Hay una explosión de la apropiación de la tecnología, aunque en el corto plazo, deberíamos tener la capacidad de la creación de tecnologías”, señala.
Destaca que el uso de drones es un tema que ha convocado mucho la curiosidad de los jóvenes y sus aplicaciones ya han trascendido el tema de los audiovisuales y se están desarrollando aplicaciones interesantes como el de un prototipo que se está trabajando en la Escuela Militar de Ingeniería (EMI) con inteligencia artificial, y la oferta de drones para monitorear los hatos ganaderos en los llanos de Beni y Santa Cruz, por citar uno de los ejemplos más significativos.
En criterio de Durán, la apuesta por el tema tecnológico de recursos como los drones es un desafío que ha sido asumido plenamente por los jóvenes, quienes tienen la posibilidad de adecuar los avances tecnológicos a las demandas del país.
