Conversamos con el Director Ejecutivo de Transferencias de Dinero Digital y Pagos Personales para Visa, sobre los desafíos y las oportunidades de la región en esta plataforma en línea.

Conectarnos a internet se ha hecho indispensable durante los últimos años. Sea para ver nuestros correos, revisar nuestras cuentas, ver redes sociales o comunicarnos con nuestros seres queridos, miles de usuarios dentro de la región se conectan día a día para llevar parte de su vida dentro de la web.

Un área que no ha quedado fuera de esta transformación son las compras, que poco a poco, desde grandes empresas hasta pequeños comercios han comenzado a adaptarse hacia esta tendencia. 

Para conversar precisamente sobre este fenómeno, y analizar parte del último estudio Visa eReadiness sobre este canal, en AETecno hablamos con Brayan Peralta, Director Ejecutivo de Transferencias de Dinero Digital y Pagos Personales para Visa, quien nos comentó hacia dónde va Latinoamérica dentro de esta plataforma. 

¿Cómo ves el escenario actual del comercio electrónico dentro de la región?

Lo veo muy positivo. Estamos muy satisfechos con esta área dentro de Latinoamérica ya que existen grandes oportunidades. Cada vez vemos más grandes actores entrando a aprovechar el canal de ventas en línea, y cada vez más, los usuarios de internet aprovechan sus beneficios para comprar. De manera que el crecimiento que ha tenido el comercio electrónico, y que se proyecta tener, es muy promisorio y estamos muy satisfechos, como también muy activos en continuar con el desarrollo de este canal.

¿Es una plataforma que todavía está en desarrollo, ya se encuentra establecida o está muy incipiente dentro de América Latina?

Creemos que todavía queda mucho por crecer pero hay tendencias muy positivas. Cada vez más los jugadores implementan soluciones para mejorar la experiencia del consumidor, mejorando las ofertas (no necesariamente promociones), entregando productos y servicios cada vez más relevantes, y albergar más transacciones de día a día. Todo estos son buenos indicadores de un comercio electrónico que se consolida en la región.

También hay oportunidades de seguir aumentando, para que más de esos usuarios de internet se conviertan en compradores. Dentro de uno de nuestros últimos estudios categorizamos por primera vez estos tipos de consumidores en cuatro categorías. 

Esto es muy interesante porque está el consumidor experto, que es aquel que se siente cómodo comprando y que tiene este hábito donde realiza más de 12 transacciones al año; el explorador, que utiliza el canal y que va camino a volverse experto; luego está el espectador, que en algún momento ha experimentado el comercio electrónico pero no tiene un hábito de consumo; finalmente está el tradicionalista, que todavía se resiste a probar el canal. 

¿Cuál es el comprador más común dentro de Latinoamérica dentro de estas cuatro categorías?

El comprador más común en América Latina es el espectador, con 33% según arroja el estudio. Es un individuo de edad promedio de 39 años, de un ingreso promedio de US$1.300 dólares mensuales y que dice pasar 3,3 horas en internet. 

Como es la primera vez que incluimos esta categoría en el estudio, todavía no tenemos tendencias claras para el futuro, por lo menos hasta que tengamos una nueva versión del estudio. Pero cuando ves el desarrollo del comercio electrónico en Latinoamérica, que entre el 2011 y el 2013 creció un 44% eso nos dice mucho. Podemos concluir que obviamente, cada vez más comercio utiliza el canal para llegar a más y nuevos consumidores, y a su vez cada vez más consumidores responden al canal y empiezan a hacer sus compras a través de este. 

¿Qué país podría dar la sorpresa en E-commerce durante los próximos años, además de los líderes hasta el minuto?

Cuando ves Brasil, México y Chile, todos ellos y también Argentina, vemos una actividad de parte de los comercios en tener las plataformas apropiadas para servir a los clientes, las tecnologías apropiadas para tener una experiencia efectiva y segura para el consumidor. 

Además podemos ver otros mercados como Colombia y Perú, con crecimientos muy importantes donde el comercio detallista también presenta aumentos relevantes en el canal, y en el desarrollo de soluciones y alternativas tecnológicas.

¿Crees que la aplicación de la banda ancha y la ampliación de servicios hacia smartphones le juega a favor al comercio electrónico?

Sí, definitivamente y Chile es un claro ejemplo de eso. El acceso a dispositivos dentro de este país es bastante alto, hay una conectividad sólida y sigue creciendo. Esto claramente juega a favor. 

Hay países donde hay agendas digitales, impulsadas por el propio gobierno que ayudan mucho no sólo al tema de la educación sino que también en la experiencia de compra en línea de los consumidores. Si vemos países como Colombia, donde hay estos programas, vemos el impacto también en el comercio electrónico con una tendencia creciente y más jugadora, aprovechando el acceso a esa conectividad para ofrecer sus productos y servicios.

Es porque la gente se acostumbra, en parte, a llevar su vida completa a internet.

Totalmente. Si ves, por ejemplo, la penetración de las redes sociales en Latinoamérica es enorme. La mayoría de los usuarios de internet participan de estas plataformas, donde se comunican con parientes, comparten experiencias, viven su día a día en línea. Por ejemplo, el espectador, una de las categorías de consumidores de nuestro estudio, dice pasar 3,3 horas conectado a internet.

Obviamente, luego de pasar esta cantidad de tiempo en línea, el paso siguiente es comprar. Es decir, llevar sus actividades de la web a la parte del consumo, y justamente el crecimiento del comercio electrónico lo refleja.

¿Qué ventajas existen en la región en comparación con otros mercados globales?

Nosotros comparamos a la región con Francia, en base a los datos que pudimos recabar en nuestro estudio, y lo que vemos dentro de las ventajas de Latinoamérica es que es un mercado en crecimiento, donde todavía hay mucho por hacer. Tenemos que aprovechar eso, como también la alta penetración de internet en la población. Alrededor de 46% de las personas en la región ya están en línea, lo que te dice que hay un alcance alto y en crecimiento, especialmente dentro de los jóvenes. La mayoría de los usuarios dentro de América Latina tiene bajo los 35 años, es un tipo de cliente que creció en línea. Todas estas son ventajas que tienen el continente para seguir creciendo aprovechando las virtudes del canal.