Una nueva plataforma con procesadores para centros de datos es parte del eje central que tendrá la compañía de aquí en más. Viajamos a Ciudad de México para conocer cómo impactará en la industria.
Por Héctor Cancino desde Ciudad de México. No cabe ninguna duda de que la industria tecnológica ha cambiado exponencialmente en los últimos años. El cambio es la constante en esta industria que exige innovaciones permanentes y que a su vez, impulsa al resto de los sectores a sumarse a esta revolución.
Pero detrás de todo cambio existe un enorme trabajo de desarrollo que permite la aparición de estas nuevas tecnologías. En este contexto, AETecno viajó a Ciudad de México para conocer con más detalles las novedades que ha presentado uno de los actores clave de la industria.
Se trata de Intel y el lanzamiento de su nueva plataforma escalable de procesadores Xeon diseñados “desde cero” para soportar una gama creciente de centros de datos existentes y emergentes y cargas de trabajo de red, incluyendo computación en la nube, computación de alto rendimiento e inteligencia artificial. En palabras de la propia empresa, hablamos del mayor conjunto de avances en procesadores para centros de datos y redes en una década.
Pedro Cerecer, director de ventas de Cloud Services de Intel en las Américas dialogó con AETecno para explicar los alcances de este anuncio, adelantando desde ya su actual disponibilidad para Latinoamérica. La plataforma escalable de procesadores Xeon viene de la mano de los fabricantes multinacionales como Hp, Dell, Lenovo, Cisco o en los mismos servidores de gigantes como Amazon, Google o Azure, entre otros.
La escalabilidad de la plataforma radica en la optimización para satisfacer una amplia gama de demandas de rendimiento en centros de datos y redes de comunicaciones. Esto se traduce en procesadores Intel Xeon que ofrecen hasta 28 núcleos y hasta 6 terabytes de memoria.
Pedro Cerecer explica que si tratáramos de asimilar lo que implica el aumento en la potencia, podemos pensar en los smartphones, que como mucho, de una generación o año a otro pudieran mejorar 20% o 30%. Sin embargo, “aquí vamos a ver un 400% de mejora versus algunas versiones de otros años. Imagina que de un teléfono pasas a la siguiente versión pero con cuatro veces más poder de procesamiento. Es como que en un teléfono pudieras almacenar 70 años de películas HD continuas”, agrega.
Ahora bien, el directivo puntualiza que no debemos dejarnos llevar sólo por la cantidad de núcleos que se posean, pues no todo redunda en eso. Aunque tener más núcleos en los procesadores te dará más rendimiento, la posibilidad de procesar respuestas más rápido, y consumir menos energía, lo cual es altamente ventajoso en los grandes centros de datos que acumulan mucho calor, esto no quiere decir que un procesador con menos núcleos sea necesariamente inferior en rendimiento.
El ejecutivo de Intel comenta: “Hay que ver otros factores: cómo está hecho, cuánta respuesta y memoria tiene. Cada uno tiene su propio sistema y es importante porque puede no estar optimizado para cierta aplicación. Uno de 8 núcleos genérico,pero que no fue adaptado, no será mejor comparado con otro de dos núcleos que fue trabajado fuertemente con una aplicación específica y tuvo cambios en sus software y procesador para funcionar perfecto y con buen tiempo de respuesta, pues están hechos el uno para el otro”.
¿Para qué tanta potencia?
Inteligencia artificial, nuevas redes 5G, vehículos autónomos y realidad virtual son algunas de las innovaciones tecnológicas que más fuerte han sonado durante los últimos años. Muchas aplicaciones de ellas ya son una realidad, sin embargo, no a la escala que se espera en el mediano plazo, para cuando deberían de estar masificadas. Pero esto implicará una exigencia mucho mayor para soportarlas.
Rachel Mushahwar, gerente general de Intel para ventas en las Américas expuso durante el evento en Ciudad de México que los datos son el nuevo disruptor, de allí que sean los centros de datos los que estén transformando la innovación. Por eso, se requieren procesadores aptos para los nuevos servicios digitales, lo cual ha llevado a un notable cambio estratégico de la compañía, pues “Intel se está transformando en una empresa orientada desde los PCs hacia los datos”.
Pedro Cerecer menciona: “Hay muchas tecnologías que están siendo disruptivas y que por sí solas generarían un modelo económico diferente o nuevo. La que más está creciendo ahora y con más demanda e interés es inteligencia artificial” Y respecto a todo el resto de las innovaciones, agrega: “Si vemos todas estas plataformas o tendencias, lo que nos ocupa a nosotros como Intel es el habilitarlas, por eso desarrollamos plataformas como estas (Xeon)”.
¿Cómo nos beneficia?
Consultado por las aplicaciones o beneficios de este lanzamiento, si se limitará sólo para ámbitos empresariales, Cerecer explica que los usuarios residenciales también se beneficiarán de alguna manera, “Lo va a ver reflejado al momento de seleccionar alguna película con algún proveedor de contenido en línea, por ejemplo, y vea que esa película responde más rápido, con mejor calidad o con recomendaciones más exactas porque me conoce mejor y hay un cierto nivel de inteligencia artificial detrás que me hace sugerencias, no sólo para contenidos, sino para compras”.
Pero eso es sólo por ahora, pues el directivo de Intel añade: “En el futuro, lo voy a ver cuando me suba en un auto y le diga que me lleve a la oficina y entienda que soy Pedro, pues me reconoce, sabe donde trabajo y me lleve hasta ese lugar sin ningún accidente; o también cuando se pueda operar a una persona solamente a través de máquinas sin intervención humana, o de una fábrica donde se trabaje 24x7 sin intervención alguna”.
----------Algunos datos de las capacidades de la plataforma escalable Xeon--------------
Con hasta 28 de los núcleos de más alto rendimiento, la nueva plataforma Intel Xeon Scalable puede soportar hasta 4.2 veces más máquinas virtuales y hasta cinco veces más transacciones por segundo que los sistemas con cuatro años de antigüedad.
Configurada para almacenamiento, entrega hasta cinco veces más IOPS con una latencia hasta un 70% menor para rápidamente almacenar datos o traerlos para análisis. Para comunicaciones, la plataforma Intel Xeon Scalable puede alimentar las nuevas redes 5G, que ofrecen rendimiento hasta 2.5 veces mejor para aplicaciones de redes claves.