Numa Numa se lanzó antes de la era Youtube, pese a eso superó las 700 millones de reproducciones y todavía nadie sabe explicar bien el porqué de su éxito.
Las probabilidades de haber navegado por internet sin haberse cruzado con Numa Numa son muy escasas. Con más de 700 millones de visitas a la fecha, el video fue subido en una era previa a YouTube y hoy es considerado el primer video viral.
La grabación, hecha con una webcam, muestra al joven Gary Brolsma sentado en su oscura habitación, iluminado solo por el monitor de su computadora. Al ritmo del hit europeo Dragostea Din Tei, del grupo moldavo O-Zone, Brolsma despliega en apenas un minuto y medio una serie de extraños e hilarantes movimientos de baile que lo convertirían en una estrella de fama mundial.
El video fue subido en diciembre de 2004 en el sitio Newgrounds, una página que ofrecía videos y animaciones en formato Flash. YouTube no sería lanzado hasta febrero de 2005, pero eso no impidió que Numa Numa se transformara rápidamente en uno de los videos más vistos de toda la historia de internet.
Diez años después, Brolsma, de 28 años, sigue viviendo con su familia en Nueva Jersey, aunque en su historial cuenta con apariciones en el canal musical VH1, parodias en South Park y un álbum de música, entre otras rarezas pop.
Hasta el día de hoy, Brolsma no sabe explicar los motivos detrás el éxito detrás de su video, que grabó como parte de una broma para enviarle a sus amigos. Sin embargo, cree que parte de ese elemento lúdico es lo que lo llevó a reproducirse en millones de computadoras y celulares , según lo expresó recientemente en una entrevista en el sitio de tecnología Cnet: “Mucha gente se concentra en hacer que las cosas sean virales. Nunca tuve esa intención. Me estaba divirtiendo. Las cosas virales ocurren por sí solas. Muchos videos tratan desesperadamente de ser graciosos. El mío no estaba guionado. Fue apretar ‘grabar’ y dejar fluir”.
El por qué de la viralización
Aunque la Real Academia Española solo entiende lo viral como lo perteneciente o relativo a los virus, en los últimos años el término se suele utilizar para adjetivar la gran popularidad en internet que alcanzan ciertos productos comunicacionales, ya sea un video, un discurso o hasta una foto.
Entrevistado por la revista The New Republic, el investigador estadounidense Jonah Berger explicó que lo emotivo es un gran impulsor de lo viral: “Ya sea que algo nos toca en el corazón, nos hace enojar o provoca controversia, mientras más nos importa, más compartimos”.
En el mismo artículo se cita un experimento realizado en 2013 por Karen Nelson-Field, una experta en marketing de la Universidad de Australia del Sur. En la investigación se comprobó que los videos que provocan emociones de “alta excitación” en los usuarios son compartidos el doble más que aquellos que registran respuestas emocionalmente “bajas”.
Ya sea PSY cantando su Gangnam Style o una mujer caminando por Nueva York mientras es acosada, lo viral no conoce límites y todavía es difícil determinar cuál será el próximo en estallar en la web.
De todas formas, para aquellos que quieran intentar crear el próximo Numa Numa, Brolsman tiene un consejo muy simple: “Diviértanse con ello. Si estás haciendo algo y tu intención es ser gracioso pero no te estás divirtiendo contigo mismo, no va a funcionar”.