El director de MBA de la Universidad de Anáhuac Norte presenta sus proyecciones para 2011 en la educación ejecutiva y augura un clima favorable para los negocios.
El director de MBA de la mexicana Universidad de Anáhuac Norte, Juan Pablo Calderón Dávalos, señala que este será un muy buen año para la Educación Ejecutiva, y asegura que la inseguridad no es un impedimento para hacer negocios en el país.
¿Cuáles son sus perspectivas para los MBA y la Educación Ejecutiva en 2011?
En los últimos 5 o 7 años ha ido creciendo la demanda por estos programas, pero no al nivel que quisiéramos, y no me refiero al negocio que representa, sino a la necesidad de este país por tener gente formada.
La demanda ha crecido anualmente al 6-7%. Con la crisis de 2008-2009 no registramos ninguna caída en nuestra matrícula, de hecho, el MBA en particular creció un 13%.
En las “generaciones de la crisis” creció el número de estudiantes, pese a que se cortó casi al 100% el apoyo de las empresas. Los estudiantes decidieron seguir sus proyectos o empezarlos de manera particular.
Ahora, el crecimiento fue cercano al 40% respecto a enero de 2010. Estamos recibiendo una gran cantidad de solicitudes y lo mismo pasa en las otras escuelas de negocios.
Entonces, sus proyecciones para el futuro son positivas...
Por supuesto. Como escuelas tenemos dos grandes oportunidades: uno, que crezca nuestra matrícula, y dos, que podamos hacer un screening mejor y escoger a nuestros estudiantes.
Pienso que ahora en julio vamos a tener el doble de estudiantes que el año pasado. Esto se debe al momento coyuntural. La economía mundial está teniendo una recuperación generalizada. Salvo que pase algo excepcional que acarree las economías del mundo, los próximos dos años, particularmente para México, serán muy buenos.
Al gobierno de Felipe Calderón le quedan dos años, y cuando un gobierno está en transición gasta más y no hace un subejercicio de presupuesto. En consecuencia, se generan más ingresos. Con más ingresos, crece la demanda de educación ejecutiva.
Entonces las empresas empiezan a liberar recursos que tenían congelados y comienzan los reacercamientos con las escuelas de negocios. Por ejemplo, en Anáhuac Norte formamos a todo el cuerpo directivo de HSBC de México. Ese tipo de acercamientos está agarrando velocidad.
¿Y cómo se vislumbra el clima de negocios para este año?
Bueno, el talón de Aquiles de este país es la inseguridad. Pero las variables macroeconómicas están mejor que nunca. La inflación que cerró en 4,5% en 2010, se ha mantenido; un tipo de cambio estable, de 12, 3 pesos por dólar; el petróleo está asegurado, lo que garantiza dos terceras partes del ingreso de la federación; las reservas internacionales del Banco de México son las más altas de la historia del país, superan los US$100.000 millones. Todo eso hace que la gente esté tranquila.
¿Qué pasa con el tema de la inseguridad, no ahuyenta las inversiones?
Ese tema es el que más ha preocupado al gobierno y el tema que más nos preocupa a todos. No importa a qué te dediques, porque de eso puede depender tu negocio. Por ejemplo, una automotriz que se iba a plantar en Saltillo, una zona que llaman “El Pequeño Detroit” por sus grandes armadoras de coches, pensaba invertir más de US $1.500 millones.
Pues ahora duda, porque es una zona complicada del país con temas de inseguridad y no quieren mandar a sus ejecutivos a un lugar como ese. Pero fuera de eso, el ambiente es muy propicio para hacer negocios.
¿Y la inseguridad puede afectar a la formación de postgrado?
La inseguridad lo único que genera es que se aumenten los costos fijos de las organizaciones, en vigilancia, etcétera. Posiblemente al mundo del MBA no le significa nada importante, pero a la universidad en su conjunto la obliga a invertir más en la seguridad del campus.
Tristemente, la inseguridad puede llegar a ser una oportunidad. Es una variable que nadie quiere, pero la formación juega un rol muy importante ahí. Por ejemplo, la Facultad de Derecho ha lanzado una Maestría en Derecho Militar. Ahí es donde se forman los militares de alto rango que van a liderar el combate contra el narcotráfico.
¿Qué ventaja puede tener estudiar un MBA en México, frente a otros países de América Latina?
Pese a que no veo grandes diferencias, porque en Argentina, Brasil y otros países hay excelentes escuelas, una de las mayores ventajas de estudiar un MBA en México es la cercanía geográfica con Estados Unidos. Esta obliga a que los programas tengan un cierto sesgo hacia la dinámica de hacer negocios como ellos, porque también nuestra economía depende en un 80% de ese país. Alguien de Buenos Aires, que está a 15 horas, no conoce la dinámica de hacer negocios con los estadounidenses como lo hace México.
¿Y la Universidad de Anáhuac piensa internacionalizarse?
Tanto nosotros como nuestras escuelas amigas queremos internacionalizar más los MBA. Queremos traer gente de otros países. Aquí en Anáhuac sólo el 10% es estudiante internacional. De ese 10%, el 80% viene de América Latina y el 20% de EE.UU. Y de los latinos, la mayoría son venezolanos y argentinos.
Sin embargo, nosotros queremos terminar nuestro proceso de acreditación internacional, porque es una boleta de entrada a otros mercados. La certificación es una plataforma natural, por eso nuestros planes de internacionalización vienen más a mediano y largo plazo.
¿A quiénes se refiere con “escuelas amigas”?
Al Tecnológico de Monterrey, Ipade, Itam y Anáhuac del Sur. Pese a que somos competidores, somos amigos. Hace poco menos de dos años, formamos un Consejo Técnico para el MBA, para que juntos podamos compartir las preocupaciones generales del mercado.
Más que arrebatarnos a un estudiante, nuestra misión va más allá que la comercial, porque nos preocupa qué es lo que estamos aportando a nuestros estudiantes. Ver si nuestros programas están abonando al desarrollo económico del país, que el mercado entienda las ventajas de estudiar un MBA, más que dónde lo estudie.
Cuando hacemos una convención, algún evento, invitamos a nuestros colegas de todas las universidades. Hay profesores, investigadores que pueden exponer en el mismo panel. Posiblemente no los une el nombre de la universidad, pero sí los une la línea de investigación. Entonces pueden publicar juntos, conversar, etc.
¿Cree que los MBA necesitan diferenciarse?
Hay 6.500 programas de MBA en el mundo, entonces en un principio es un commodity. La estructura curricular es igual aquí, en Harvard, en España, etc., pero cada programa se traduce después en casos producidos, en artículos, investigaciones, en algo en particular. Nosotros nos enfocamos por sobre todo en el entrepeneurship, tenemos un sesgo muy formado en liderazgo y emprendimiento empresarial.
Hace dos años hicimos una revisión y era ilógico darle un giro hacia otro lado, por eso reforzamos nuestro posicionamiento.