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¿Es Apple la nueva Nokia?
Jueves, Enero 10, 2013 - 17:06

La compañía presenta un comportamiento bursátil que podría tenerla a las puertas de hundirse. ¿Qué tipos de acciones están aportando o restando a este pronóstico?

*Análisis de Mariña Martínez Malvar, Client Trading Services de Saxo Bank, para Sala de Inversión.

En el mundo de las compañías tecnológicas hay algo que es fascinante, resultando digno de estudio y es la capacidad que éstas tienen para convencer a los inversores de su potencial y luego no ser capaz de hacerlos creer en que el potencial de la compañía, aquel que los hizo comprar, sigue estando ahí.

Serán los tiempos que corren, la necesidad de innovación, la velocidad de las modas, etc, pero lo cierto es que a la hora de la verdad, lo que realmente es relevante para nosotros es si Apple será otro gigante más hundido en el abismo o, si por el contrario, esto es solo una pequeña corrección en su continuo camino de ascensos. Acercándonos al valor, lo primero que nos llama la atención es el soporte que presenta en torno a los US$500. Vemos que en sus correcciones anteriores, una vez la acción llegaba a esos niveles, la fuerza compradora de los accionistas entraba en juego haciéndola corregir, pero ¿es objetivo este positivismo sobre el título?

Desde el punto de vista fundamental estamos hablando de la compañía líder en la venta de smartphones con todavía un gran margen para el crecimiento en el sector. Además, Apple goza del gran prestigio y potencial de su tableta, el iPad Mini quizás le reste parte de las ventas destinadas al "grande" pero sin duda alguna ampliará mercado.

Apple, aunque la conozcamos tanto por sus gadgets como por sus aplicaciones, no deja de ser principalmente una compañía de hardware de donde recibe el 91% de sus ingresos, dejando únicamente el 9% de esto para el software. Así mismo, el margen de beneficio bruto de explotación es de un 31%, lo cual la sitúa en un nivel positivo más próximo de las compañías desarrolladoras de software. Esto beneficia a la empresa, pero la sitúa al mismo tiempo bajo una gran presión. Tenemos que pensar que si la media de las desarrolladoras es más bajo, lo normal sería que la empresa se viese presionada a niveles próximos, lo que podría desmotivar a los inversores a la hora de la inversión haciendo retroceder el precio.

Del mismo modo, podemos observar que Apple tiene un ratio de precio a beneficios de 11,63, mientras que el Nasdaq Composite tiene un ratio de 20,18. Esto último es un fiel reflejo de que los precios actuales de la empresa no están fuera de la realidad, incluso están por debajo de lo que deberían estar si nos basamos en la media de mercado de las empresas tecnológicas que componen dicho índice.

Pero sobre la fima se ciernen grandes presiones. Sin Steve Jobs, Apple necesitará probar al mundo que su capacidad innovadora sigue intacta. Pero no sólo esto es preocupante, si no que la compañía necesita ser capaz satisfacer la demanda de sus productos ya que la calidad de sus productos competidores podría facilitar el flujo desde usuarios Mac a otras compañías con mayor alcance y menores precios.

Pero aun así los analistas deciden ser positivos en sus perspectivas del valor, otorgándole precios nuevamente en el entorno de los US$700 y, en caso de que estén en lo cierto, todavía estamos a tiempo para engancharnos al carro de la compañía de la manzana.

Autores

Sala de Inversión