La compañía argentina Arsat se adjudicó 25% del espectro radioeléctrico 3G del país y será Sociedad Anónima del estado. Ministro de Planificación, Julio De Vido, dijo que, "los argentinos estamos cansados, estamos hartos de los monopolios".
Buenos Aires. El Gobierno argentino anunció este miércoles que a través de la compañía estatal Arsat ingreserá al mercado de telefonía celular comenzando a operar frecuencias de telefonía móvil porque está "harto" de los monopolios, luego de que el estado se adjudicara la subasta por el 25% del espectro radioeléctrico 3G del país.
Las frecuencias, en las bandas de 850 y 1900 megahertz, serán operadas por la compañía estatal de telecomunicaciones Arsat, que se podrá asociar con pequeñas y medianas empresas y cooperativas para su explotación.
"Los argentinos estamos cansados, estamos hartos de los monopolios, y no queremos de ninguna manera generar situaciones que empresas, que hoy tal vez no sean monopólicas en la prestación de servicio, transformarlas en condición de tal", dijo el ministro de Planificación, Julio De Vido.
Los mercados leyeron la medida como un nuevo avance del Gobierno de la presidenta peronista Cristina Fernández sobre la economía.
Las acciones de Telecom Argentina caían 2,8% a las 1800 GMT) tras la cancelación de la subasta, en la cual había participado, mientras que el índice líder Merval se mantenía casi plano.
"Los inversores (bursátiles) no recibieron con buen agrado la incursión (del Gobierno) en el negocio de la telefonía celular", dijo Dionisio Corneille, director de Corneille Sociedad de Bolsa.
La administración de Fernández mantiene un fuerte control sobre la economía y ha promovido que el Estado desembarque en sectores clave como el energético.
En mayo, el Gobierno nacionalizó la mayor petrolera del país, YPF, en manos del grupo español Repsol. También abrió expedientes contra grupos de telecomunicaciones por posible posición dominante.
El Gobierno había llamado en mayo del 2011 a una licitación de varias frecuencias que representan un cuarto del espectro radioeléctrico donde opera la banda 3G en Argentina.
De Vido dijo que, luego de analizar las ofertas de cinco compañías, se decidió suspender la subasta por razones de "oportunidad, mérito y conveniencia".
Los postulantes eran Nextel Communications Argentina, de NII Holdings; Telecom Argentina, controlada indirectamente por Telecom Italia; Claro Argentina, de la mexicana América Móvil; y dos grupos locales (Multitrunk y Superphone).
De Vido dijo que Claro demostró ser la única postulante con capacidad financiera para operar las frecuencias; pero aclaró que, si le las adjudicaban, iba a transformarse "virtualmente en un monopolio".
Nextel, Telecom y Claro, junto con Movistar, de la española Telefónica, se reparten el mercado celular argentino.
"Nuestra voluntad es que la compañía quede como una equilibrante del mercado, no sólo como una empresa testigo de presencia menor", dijo De Vido sobre Arsat.