Michael Guntrum perdió su celular mientras pescaba en Pennsylvania. Ahora tras más de un año, otro hombre recuperó el aparato y lo arregló con una bolsa de arroz.
El hecho de perder o romper un smartphone se ha convertido en una verdadera tragedia en el mundo actual, y es que no sólo malgastas dinero, también puedes perder fotografías, documentos, contactos, correos electrónicos y más.
Michael Guntrum vivió una situación así cuando en marzo del 2015, mientras pescaba en hielo en Knox, Pennsylvania, su iPhone cayó por el hoyo donde esperaba sacar algunos peces.
"El clima estaba a menos 25 grados, entonces dos amigos y yo fuimos a pescar en hielo. Estábamos sentados y dejé mi teléfono en mi regazo, y en ese momento se resbalo. Aunque en vez de caer en la nieve, golpeo la orilla y se deslizó hasta el hoyo’, relató Guntrum a BuzzFeed News.
Guntrum creyó que jamás vería ese teléfono otra vez, hasta que otro hombre, un ingeniero mecánico llamado Daniel Kalgren lo llamó para decirle que había recuperado su smartphone.
¿Cómo fue posible?
En septiembre del 2015 el lago fue drenado por un problema en la estructura. Al quedar vacío, Kalgren tomó su detector de metal y comenzó a buscar objetos en el terreno, así fue como se topó con el iPhone enterrado en lodo y arcilla.
El ingeniero tomó el teléfono y se lo llevó a su casa, donde lo limpió y lo colocó en arroz, solo por curiosidad para ver si funcionaba, según relata a BuzzFeed News. La sorpresa llegó dos días después, cuando el iPhone prendió repentinamente.
"Fue lo único que encontré ese día. Fui capaz de prenderlo y busqué su número [el de Guntrum]. El sabe que o tengo y se lo mandaré por correo’, afirmó Kalgren.
Por su parte, Guntrum no creyó en un principio que fuera su teléfono, hasta que el cazador de tesoros le envió una fotografía del mismo.
Definitivamente es un caso sorpresivo, aunque no es la primera vez que reportan que un smartphone aguanta en condiciones extremas.