De acuerdo al informe Liga mundial de velocidad de banda ancha 2018, Uruguay, Cuba y República Dominicana tienen las mejores velocidades de la región.
Un nuevo reporte internacional arrojó el estado de la banda ancha en diferentes países de Latinoamérica y el mundo. Se trata del informe Liga mundial de velocidad de banda ancha 2018 realizado por la firma británica Cable, el que abarcó 200 países.
El listado es liderado por países como Singapur, Suecia y Dinamarca, los que presentan una velocidad de descarga promedio de 60,39 Mbps, 46,00 Mbps y 43,99 Mbps respectivamente.
En tanto, a nivel mundial, el reporte asegura que el promedio de velocidad de conexiones de banda ancha es de 7,4 Mbps. Esto quiere decir que para la descarga de un archivo de 5 GB, cada usuario demora -en promedio- dos horas y 24 minutos.
Estamos hablando de una diferencia importante si consideramos los 11 minutos y 18 segundos que necesita, en promedio, un usuario de Singapur para descargar un archivo del mismo tamaño.
En el caso de Latinoamérica, dentro de los primeros puestos se encuentra Uruguay, Cuba y República Dominicana.
A estos países, dentro de Sudamérica, les siguen Chile (4,74 Mbps), Perú (3,31 Mbps), Colombia (3,25 Mbps), Argentina (3,18 Mbps), Ecuador (2,76 Mbps) y Brasil (2,58 Mbps), entre otros.
Jorge Pavez, académico de Ingeniería en Informática y jefe de Innovación y Desarrollo de la U. Mayor, explicó a BioBioChile que en relación al tema, hay diversos aspectos a considerar.
“Lo primero es que (en Chile) no hay una regulación real de la velocidad de descarga de tu internet, porque esta velocidad no es sólo lo que contratas, sino que también hay otros factores que están dentro de lo que se hace en una medición”, comenzó señalando.
“Por ejemplo, no sirve de nada que llegue una red de fibra óptica hasta tu casa, si en tu hogar tienes un router antiguo, que tiene poco nivel de transmisión. Además hay que considerar que la velocidad se reparte entre los demás componentes. Osea, si tienes 200 megas y posees 10 equipos, baja a 20 megas por dispositivo”, agregó.
En ese sentido, Pavez afirmó que, por un lado, en Chile no hay regulación. “Y por otro lado, el tema de internet comenzó bastante tarde en comparación a muchos de los países que aparecen en el estudio, lo que hace que las empresas tengan poca inversión para mejorar su red de banda ancha”.
Además, el especialista menciona que el Estado no se ha hecho cargo de este costo para que se mejoren las redes de banda ancha y así puedan ingresar nuevos proveedores.
“Hoy en día vemos que en los planes de una y otra compañía, no hay tanta diferencia, entonces tampoco hay muchos incentivos que lleven a las empresas a mejorar”, puntualizó.
Finalmente, Pavez sostuvo que los precios en Chile son comparables a los de países desarrollados. Sin embargo, en estos últimos cuentan con mayores prestaciones, un nivel de calidad más alto “y la protección al cliente es mucho mayor”.