Luego de las investigaciones sobre monopolio del gigante de internet en Europa, le solicitaron que no muestre preferencia en sus productos en los resultados de las búsquedas.
Google se verá obligado a cambiar la manera en que presenta los resultados de la búsqueda en internet en Europa o enfrentará cargos antimonopolio por "desviar tráfico" a sus propios servicios, dijo el jefe antimonopolio de la Unión Europea según declaraciones publicadas por el diario The Financial Times.
El comisionado de competencia de la UE, Joaquín Almunia, dijo al periódico en una entrevista que pretende evitar que Google, supuestamente, distorsione la elección para los consumidores y tome negocios de los rivales.
"Estamos aún investigando, pero mi opinión es que (Google) está desviando el tráfico", dijo Almunia según el periódico, refiriéndose al trato preferencial del gigante de internet para con su propio servicio de búsqueda. Además, afirmó que teme un abuso de la posición dominante del buscador frente a otras compañías.
La UE le dio un ultimátum a Google el 18 de diciembre, con un plazo de un mes para presentar propuestas detalladas para resolver una investigación de dos años sobre demandas de que usó su poder para bloquear a rivales como Microsoft.
Google ha sido el centro de una investigación basada en demandas de que favoreció sus servicios por sobre los de los rivales en resultados de búsquedas y de que habría copiado material de sitios de viajes y restaurantes sin permiso.
Almunia dijo al periódico que su preocupación era "la manera en que presentan sus propios servicios" y que "no estaba discutiendo el algoritmo", la fórmula secreta detrás del motor de búsqueda de Google.
El portavoz de Google Al Verney dijo que "continuamos trabajando en cooperación con la comisión". Mientras que el responsable del organismo espera que la compañía coopere y cambie los puntos que la UE le solicita, ya que de otro modo se vería “obligado” a presentar cargos formales.
El portavoz de Almunia confirmó las citas en el FT, pero dijo que no añaden una nueva posición en nombre de la Comisión Europea.
"Estaba subrayando que pensamos que el trato preferencial podría llevar a una desviación de tráfico, que consideramos anticompetitivo. Esta es una preocupación básica que tenemos, como lo explicamos en mayo", dijo el portavoz Antoine Colombani a la agencia Reuters.
Almunia dijo que una investigación menos avanzada sobre el sistema operativo Android de Google continuará abierta y fuera del acuerdo.