Gracias al plan que desplegó Virgin Media, los ciudadanos pueden descargar un episodio de su serie favorita "en la parada del autobús en menos de 35 segundos”.

Quien tiene un teléfono inteligente puede ir por la calle platicando en WhatsApp o subiendo fotos a Instagram, pero pocos se aventurarán a ver Netflix conectados a la red celular. ¿Cuál es la solución? Una red WiFi presente en toda la ciudad.

Esa es el programa piloto que Virgin Media de Richard Branson ha emprendido en la localidad de Chesham en el Reino Unido.

El proyecto, llamado “Steetsurfing” o “Smart Pavement”, brinda a los residentes con internet vía WiFi de 166 Mbps, cuatro veces el promedio de velocidad en México, por ejemplo. La compañía ha desplegado fibra óptica debajo de las calles para conectar sus cabinas que funcionan como puntos de acceso.

"Las personas pueden descargar un episodio de Coronation Street (una novela popular en Reino Unido) en la parada del autobús en menos de 35 segundos”, explica Virgin. Esto ayudará a reducir los costos y uso de sus planes de datos.

Pero este no es el único beneficio según Virgin. Los comercios locales que no pueden ofrecer internet y competir con grandes cadenas verán la cancha nivelada al contar con puntos de acceso a unos metros del establecimiento.