El crecimiento del mercado será exponencial, pues solamente en nueve años el volumen de facturación se multiplicará casi por 30.
Por Pablo Bejerano para ThinkBig. Si hay una tendencia ha capturado la imaginación del sector tecnológico en los últimos meses, esta es la inteligencia artificial. A veces, incluso en exceso. Pareciera que cualquier objeto pueda llevar inteligencia artificial y que todas las empresas están trabajando en este campo. Aunque el entusiasmo generalizado impide ver la realidad del valor, lo cierto es que los números acompañan a esta exaltación.
Un estudio de la firma de análisis Statista estima que en el año 2025 el mercado de la inteligencia artificial tendrá un valor de US$36.800 millones. El trabajo no se refiere solamente al software, cómo serían los algoritmos y los campos de machine learning y deep learning. Sino que tiene en cuenta todos los sectores adyacentes a la inteligencia artificial. Esto quiere decir que cualquier producto relacionado con la robótica u objeto dotado de capacidades IA entran en la ecuación.
El crecimiento del mercado será exponencial, pues solamente en nueve años el volumen de facturación se multiplicará casi por 30. Statista señala que las previsiones de volumen de negocio para 2017 son de US$1.250 millones. Este año solo será el del comienzo.
La acelerada progresión no resulta extraña teniendo en cuenta los esfuerzos que las grandes empresas están haciendo en inteligencia artificial. Y no solo son los gigantes de Silicon Valley los que se han puesto manos a la obra. Les acompaña un enjambre de startups, deseosas de destacar en uno de los campos con más futuro en el sector tecnológico. A esto se suman los trabajos que están haciendo muchas otras compañías, ya consolidadas. Como Telefónica, que está invirtiendo en la creación de proyectos como Aura y la Cuarta Plataforma.
Y es que la inteligencia artificial apela a uno de los motores de la tecnología en los últimos años. Se trata de la comodidad , una facultad que el usuario siempre busca que esté de su parte. Los inventos tecnológicos, tanto de hardware como de software, llevan tiempo buscando la inmediatez, facilitar las cosas, quitar barreras. Esto es precisamente lo que hace la inteligencia artificial, que trata de entender al usuario para llegar mejor hasta él. Cada vez veremos más de esto y cada vez se podrá hacer más negocio con ello, según las previsiones.