Los dispositivos móviles, así como el creciente uso de aplicaciones de Internet, ha aumentado sustancialmente la demanda por este espacio.

La tecnología es el motor de los sistemas socioeconómicos a nivel mundial. Queda claro que para lograr un desarrollo integral, los actores políticos deben trabajar en colaboración con la sociedad civil para el desarrollo de políticas innovadoras, universales y asequibles.

Para la región de América Latina y el Caribe, la política y gestión eficiente del espectro son temas especialmente importantes en el contexto del desarrollo de la banda ancha.

Los dispositivos móviles, así como el creciente uso de aplicaciones de Internet, ha aumentado sustancialmente la demanda de espectro.

A propósito, la  Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Banco Interamericano de Desarrollo (IDB, por sus siglas en inglés), presentaron recomendaciones de política de espectro:

1. Planificación, gestión y control del espectro. Reconocer que la gestión ineficiente del espectro generalmente se traduce en una infraestructura e inversión de telecomunicaciones inalámbricas insuficientes, una cobertura inadecuada para la población de redes de telecomunicaciones inalámbricas, baja calidad y altos precios.

2. Aumentar el acceso. Las redes inalámbricas suelen ser la forma más rentable de llegar a áreas remotas, especialmente con el crecimiento de tecnologías que utilizan frecuencias más bajas con un alcance más amplio.

3. Asignación del espectro. Se recomienda flexibilidad en la asignación, no sólo en términos de neutralidad tecnológica, sino también en términos de servicio (“neutralidad del servicio”).

Establecer topes de espectro, el desarrollo de mercados secundarios, el intercambio de espectro y el reabastecimiento de espectro son otras herramientas que los legisladores pueden utilizar para aumentar la competencia y el uso eficiente del espectro.

Además, se recomienda asignar el espectro mediante subastas, ya que aumentan la certidumbre del mercado y pueden ser un mecanismo para establecer precios de forma natural, dejando al regulador la función de establecer precios mínimos de referencia.

4. TDT. Finalmente, el éxito de la transición a la Televisión Digital Terrestre (TDT) en los países de América Latina requiere de campañas de información y subsidios focalizados (para decodificadores o costos de migración de los organismos de radiodifusión).