Los usuarios están demandado un crecimiento en el ancho de banda, en la cobertura y en la calidad de los servicios de telefonía, lo que derivará en que los operadores inviertan más, según la compañía.

Después de adquirir a Alcatel-Lucent por más de US$16.000 millones, la estrategia de Nokia en México es ser parte importante de la transformación del sector de telecomunicaciones, al brindar tecnología que puede mejorar la conectividad y participando en proyectos como la red compartida.

Thomas Bertrand, director de Ventas para el Norte de América Latina en Nokia, indicó que los usuarios en el país están demandado un crecimiento en el ancho de banda, en la cobertura y en la calidad de los servicios de telefonía, sobre todo después de la Reforma de Telecomunicaciones, lo que derivará en que los operadores inviertan más.

"Nosotros somos proveedores de todos los operadores de México, sin excepción, y eso nos genera un potencial de crecimiento grande”, aseguró.

Una muestra de esto es el interés de las operadoras de telefonía por ampliar sus redes de Cuarta Generación (4G) o LTE, en las que Nokia tras fusionarse con Alcatel-Lucent es número uno en el mundo.

Bertrand comentó que el potencial del mercado mexicano es aún mayor si se considera el proyecto de la red compartida que está impulsando el gobierno, y cuyas bases de licitación acaban de publicarse hace unos días.

Dicho proyecto está coordinado por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, así como por el Instituto Federal de Telecomunicaciones, con el objetivo de tener una red que cubra a más del 85% de la población en los próximos siete años.

El director explicó que Nokia no participaría directamente en la licitación, en su lugar esperan ser contratados por alguno de los consorcios ganadores.

"Lo que hacen esos consorcios es llamarnos y solicitarnos apoyo técnico, los estamos ayudando con nuestra experiencia en diseño de red, en la arquitectura y tecnología que se necesitará. Los apoyamos con la idea de que si cualquiera gana nos invite a construir la red”, detalló.

En su opinión, si Nokia y Alcatel-Lucent siguieran como empresas separadas sería difícil participar en este proyecto, pero ahora que son una pueden construir la red de principio a fin.

Con respecto a los desafíos que habrá este año en América Latina, el directivo identificó la depreciación de las monedas de la región contra el dólar como un factor que podría reducir las inversiones del sector.