Diversos actores vinculados al procedimiento de licitación consideraron que con o sin reformas legales es posible avanzar en materia de televisión.
El marco legal actual permite cumplir con el compromiso presidencial de lanzar en abril próximo las bases para licitar dos cadenas de televisión digital abierta, por lo que si el tema no es incluido en la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones (LFC), ello no obstruirá el camino de las licitaciones, consideró Gonzalo Martínez Pous, integrante del Pleno de la Cofetel, quien ha trabajado en el diseño de la convocatoria.
En plena cuenta regresiva para que el Congreso de la Unión inicie la revisión de las iniciativas para mejorar las reglas del juego en materia de telecomunicaciones, diversos actores vinculados al procedimiento consideraron que con o sin reformas legales es posible avanzar en materia de televisión.
Para Javier Lozano Alarcón, presidente de la Comisión de Comunicaciones y Transportes de la Cámara de Senadores, quien además fue subsecretario de Comunicaciones de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), la licitación de nuevas alternativas de televisión abierta no requiere de reformas legales, por lo que no es necesaria una reforma legislativa: se trata de una acto administrativo con el que en cualquier momento pueden cumplir la SCT y la Cofetel.
Más allá de si hay reforma o no, Martínez Pous asegura que se mantiene el trabajo interdependencias –con la SCT como cabeza de sector– con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en la definición de los precios mínimos de referencia para establecer el monto de la contraprestación, y con la Comisión Federal de Competencia (CFC) en la definición de los límites de concentración de espectro que cada uno de los postores podrá poseer para evitar el surgimiento de monopolios.
Paquetes y combinaciones
Al interior del Pleno de la Cofetel, el tema central a resolver es el modelo de licitación a seguir mediante un esquema de combinatorias que contempla, por un lado, la conformación de paquetes de frecuencias, lo cual implicaría la intervención del Estado en lo que se va a licitar y, por otro lado, la alternativa de dejar que el libre mercado acomode a sus necesidades las 306 frecuencias disponibles.
Son 153 regiones y/o localidades en las que hay disponibles frecuencias del espectro radioeléctrico, cada una con doble frecuencia, por lo que el total es de 306.
Conforme al planteamiento de la Cofetel, en ambos casos se proporciona el insumo necesario no sólo para que cada interesado y postor acomode sus apuestas a la conformación de dos cadenas nacionales, entendiendo esto como adquirir espectro para lograr una amplia cobertura en ciudades y localidades con mayor población en el país.
Lo anterior implica que, dentro de un esquema de libre mercado, un jugador o consorcio podría acomodar sus apuestas conforme a la cobertura que quieran tener, lo cual se puede lograr no necesariamente con las 153 frecuencias, sino con 70 u 80, lo que implicaría que quedaría, además, un remanente para aquellos interesados en construir una cadena regional e incluso canales locales.
Cinco interesados
De acuerdo con Mony de Swaan Adati, presidente de la Cofetel, en los últimos 10 años ese organismo regulador ha recibido alrededor de 50 solicitudes de concesión para nuevas alternativas de televisión abierta, y recientemente cinco grandes empresarios con poder económico suficiente, se han acercado a esa comisión para hacer visible su interés de que se concrete el proceso de licitación.
Fuentes de las televisoras observaron que el compromiso es licitar frecuencias para nuevos canales digitales, lo que implica que se debe tener la garantía de que se cumplirá con el proceso de transición a la televisión digital terrestre.
Los tiempos comprometidos para emitir la convocatoria y las bases de licitación para las nuevas alternativas de televisión abierta estarían coincidiendo con el vencimiento del plazo para concretar el apagón analógico en la ciudad de Tijuana, previsto para el 16 de abril próximo, mientras que todavía no se tienen garantizados los recursos necesarios para continuar con la transición digital del apagón en las ciudades consideradas dentro de la segunda y tercera fases.
Fechas y hechos clave
- De acuerdo con datos de la Encuesta sobre la Penetración de Televisión Abierta en los Hogares, la disponibilidad de este servicio en la fronteriza ciudad de Tijuana es de 26.3%, pero sólo 3.4 por ciento de los hogares que dependen de la televisión abierta cuenta con televisión digital en la localidad.
- El pleno de la Cofetel determinará el 16 de marzo, con base en el reporte que entregue Teletec, empresa a la que le fue encargada la distribución de 200 mil decodificadores entre los habitantes de Tijuana, si el apagón analógico se realizará el 16 de abril próximo tal como se fijó, o se establece una extensión del plazo.
- Según el calendario establecido en la política de TDT publicada por el órgano regulador, el 26 de noviembre se realizará el siguiente apagón analógico en Mexicali, Baja California; Ciudad Juárez, Chihuahua; Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, Tamaulipas, así como en Monterrey, Nuevo León.
- En las ciudades de México, Guadalajara y el centro del país se fijó el 26 de noviembre de 2014 para finalizar la transición a la televisión digital, por lo que al siguiente año se hará en el resto de las ciudades del país, a fin de que el 31 de diciembre de 2015 se concluya la transmisión de las señales analógicas en el territorio nacional.