El dispositivo llega casi un año y medio más tarde que su versión anterior con el principal atractivo de representar un precio competitivo dentro de la gama alta.
Uno de los principales fabricantes chinos de teléfonos inteligentes, Xiaomi, lanzó este miércoles su nuevo modelo Mi5 tras un año intentando mantener con productos económicos su ventaja competitiva en el mercado chino, el mayor a escala mundial.
El Mi5, equipado con un procesador Qualcom Snapdragon 820, respeta la estrategia de precios de la marca, cuya versión básica se vende por 1.999 yuanes (aproximadamente US$306), muy más por debajo del precio medio en el mercado chino.
Xiaomi también acaba de lanzar una versión actualizada del último modelo del Mi4, a un precio de 1.699 yuanes.
Según datos publicados por la empresa, el Mi5 llega más de un año después del lanzamiento de la tableta Mi Note, y casi un año y medio más tarde que su versión anterior.
La empresa, con sede en Beijing, ha seguido fabricando productos de su gama económica RedMi para mantener su cuota en el mercado nacional.
Xiaomi no alcanzó en 2015 sus objetivo de ventas de 80 millones de terminales, pero su director ejecutivo y fundador Lei Jun argumentó durante el acto de lanzamiento del nuevo modelo que Xiaomi siguió siendo el año pasado la marca líder para los consumidores chinos.
La distancia entre Xiaomi y su inmediato perseguidor, Huawei, se ha venido reduciendo, sin embargo, con una diferencia en la cuota de mercado nunca superior al 1,5%.
Xiaomi produce más productos tecnológicos además de teléfonos inteligentes, entre ellos enrutadores, tabletas, televisiones y descodificadores, así como purificadores de aire y agua, motos escúter o pulseras inteligentes.