Puesto que Netflix no ofrece las mismas películas y programas a todo el mundo, se han popularizado los servicios que permiten violar el catálogo correspondiente a su territorio. Europa ya cayó.

Hace un mes Netflix comenzó una guerra contra los servicios de VPN (red privada virtual) y DNS que les permiten a los usuarios violar el catálogo correspondiente a su territorio y ver contenidos disponibles en otros países. La medida primero afectó a los usuarios australianos y ahora le tocó el turno a España, Inglaterra y Alemania, entre otros países europeos.

Durante el pasado fin de semana algunos usuarios se han encontrado con el mensaje "Oh, oh, algo salió mal...", que informa que hay un error de transmisión (Error H/111-1331-5059 ) ya que se está utilizando un proxy y, por tanto, el contenido está bloqueado. La solución es desactivar el proxy.

"Si todo nuestro contenido estuviera disponible globalmente, no habría razón para que los usuarios usen proxies o 'desbloqueadores' para engañar a nuestro sistema y hacerle creer que están en un país distinto a aquel en que se encuentran", reconoció David Fullagar, vicepresidente de Arquitectura de entrega de contenido en Netflix. A su vez, el ejecutivo añadió: "Estamos haciendo progresos en el licenciamiento de contenido alrededor del mundo, (...), pero tenemos un camino que recorrer antes de poder brindarle a todos nuestros usuarios las mismas series y películas a nivel global".

Las VPN pueden engañar a Netflix, haciéndole creer que el usuario está en un país diferente, lo que le permite ver el contenido que está disponible en otro país pero no en el suyo por cuestiones de licencias y derechos.

Como consecuencia de esta acción, servicios como Mediahint, Zenmate, Betternet, AppVPN, ExpressVPN, Tunnelbear y Private Internet Access, entre otros, han dejado de funcionar. Mientras que Netflix no le ofrece las mismas películas y programas de televisión a todo el mundo, la práctica de acceder a Netflix a través de una VPN tiene los días contados.