La educación es una buena inversión, dicen expertos, ya que el conocimiento acompaña de por vida.
La mayor parte de los emprendedores tienen una idea de negocio que a veces resulta insuficiente para desarrollar una empresa.
El MBA ofrece una generalidad de conocimientos funcionales y la posibilidad de integrarlos, de modo de completar el stock de conocimientos.
Recientemente la columnista argentina Agustina Grasso, estableció las cinco razones por las cuales un emprendedor debería haber uno de estos programas.
1 Profesionalización: gracias al MBA, el emprendedor se prepara para transformarse en empresario: "Ese paso requiere herramientas, aptitudes y actitudes de Dirección General y Management que pueden adquirirse en un master", asegura Silvia Torres Carbonell, quien está a cargo del Área Académica de Entrepreneurship en los MBAs y EMBAS del IAE Business School de la Universidad Austral.
Para Sebastián Auguste, director del MBA de la Universidad Torcuato Di Tella, un MBA da herramientas de gestión para poder desarrollar en forma más profesional los emprendimientos, mejorar las probabilidades de éxito y potenciar su crecimiento.
Jose Demicheli, también emprendedor, profesor de la materia Entrepreneurship, en los programas del IAE, explica que el MBA permite profundizar el entendimiento del proceso emprendedor y transmitir los conocimientos propios del oficio de emprender en todas sus dimensiones, tanto dentro como fuera de las empresas.
2 Prueba y error: esto se refiere a la posibilidad de equivocarse sobre seguro. Es que, durante el MBA, los estudiantes tienen la posibilidad de cometer errores, probar ideas, desafiar hipótesis y modelos de negocios en una zona segura, ya que en los programas se hacen simulaciones de negocios, de forma de aprender en un ambiente protegido acerca de la viabilidad de sus proyectos.
Paula Molinari, presidenta de Whalecom y profesora del MBA y EMBA de UTDT, un MBA mejora la capacidad de análisis, la habilidad para distinguir información relevante, comprender temas y encontrar soluciones.
3 Cacidad de Incubación: con la matrícula, las escuelas de negocios ofrecen la posibilidad de disponer de espacios donde desarrollar los emprendimientos. La particularidad de cada una es diferente.
Por ejemplo, la UADE cuenta con laboratorios para desarrollar prototipos de productos resultantes de sus emprendedores. Desde la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT), afirman que tienen un club de emprendedores y un proceso de desarrollo de nuevos negocios para que aquellos que se animan a emprender tengan su propio espacio.
Según datos de dicha universidad, hasta 30 alumnos por año se animan, y de los que inician el plan de negocio, la mitad llega a ponerlos en marcha. El éxito de un nuevo negocio no depende más de un 20% en la idea inicial. "El 80% depende de la ejecución, justamente para lo que entrena un MBA", dice Sebastián Auguste.
4 Generación de vínculos: las relaciones profesionales es una de las ventajas de participar en grupos de afinidad. Hay profesores con gran experiencia que ayudan en forma externa para cumplir objetivos, además de los compañeros, asegura Otarola.
Para el desarrollo de estas habilidades es tan importante el aporte del profesor y de las clases, como de los compañeros de cursada.
5 Espíritu de liderazgo: no todo es conocimiento. El fomento del espíritu emprendedor es la última clave que nombraron los especialistas.
Los MBA permiten generar un ambiente fértil para el desarrollo de un espíritu de desarrollo de nuevos negocios, afirma Juan Cruz Lozada, director de UADE Business School.
Pero, respecto a este tema, Auguste hace una salvedad: No se necesita un MBA para emprender, así como tampoco hacer el MBA garantiza que uno se vuelva emprendedor. Para ser emprendedor se requieren muchas características personales que no se entrenan fácilmente, como la tolerancia al fracaso, la tenacidad, la ambición por el éxito y la capacidad para tomar riesgos.
Pero, si uno tiene este espíritu emprendedor o ya tiene el emprendimiento, claramente un MBA suma y mejora sus probabilidades de éxito. "Hacer un MBA no te convertirá en un emprendedor pero te dará mejores herramientas para enfrentar diferentes desafíos. La educación es una buena inversión, el conocimiento te acompañará toda la vida", concluye Mariano Otarola, licenciado en Administración de Empresas.