De acuerdo a un estudio de Randstad 45% de los trabajadores nacionales no puede evitar leer su correo electrónico durante la época estival y el 33% dice que su empleador espera que esté disponible 24/7.

Se acercan las vacaciones, una de las épocas más esperadas del año, ya que permite a miles de personas tomar un merecido descanso y recargar energías para enfrentar los objetivos laborales 2015. Sin embargo, los chilenos son más trabajólicos de lo que parece y les cuesta bastante desligarse de los temas relacionados con la oficina durante el verano, debido a que 51% continúa conectado con el trabajo durante las vacaciones, de acuerdo a cifras del Workmonitor, estudio de tendencias y movilidad laboral de la consultora multinacional de RR.HH. Randstad.

Otra cifra que revela la investigación es que 45% de los chilenos no puede evitar leer su correo electrónico durante la época estival y que 33% cree que su empleador espera que esté disponible 24/7, cifra superior al promedio mundial (28%), pero inferior a la de los países Asiáticos (46%) y bastante más alta que en los europeos (15%).

Natalia Zúñiga, marketing & communications manager de Randstad, señala que esto se produce debido a la “gran penetración que Internet y la tecnología, especialmente los smartphones, han alcanzado en Chile, lo que nos permite estar conectados casi desde cualquier parte del mundo, por lo tanto, cuesta dejar de lado los temas relacionados con la oficina. Sin embargo, resalta la importancia de olvidarse de las responsabilidades laborales durante este periodo y descansar, para así “volver al trabajo cargado de energía y preparado para enfrentar con la mejor actitud los desafíos y objetivos del año que comienza”.

Para conseguir esto, Natalia sostiene que “antes de salir de vacaciones es ideal armar un plan de posibles contingencias, el cual considere las acciones a seguir en cada caso, el responsables de cada acción y los potenciales voceros. Asimismo, durante la época de descanso lo recomendable es desintoxicarse digitalmente (no pc, celular, mails ni reloj) y vivir el momento, ya que es el instante del año para dejar de pensar en el trabajo. Hay que internalizar que las empresas siguen funcionando igual y que nadie es imprescindible en una organización. Además, son días en los que la persona puede hacer todo lo que comúnmente no puede por el escaso tiempo disponible, como ir al cine, cenar con amigos, visitar familiares, dormir, hacer deporte, alimentarse bien y tener espacio para reordenarse mentalmente a nivel personal y familiar”, dice.

La ejecutiva de la multinacional agrega que actualmente “la mayoría de las personas tiene más de un correo electrónico asociado a su móvil y entre ellos el del trabajo, por lo que es más difícil desintoxicarse digitalmente. Otro punto importante es que “hoy el límite entre lo personal y lo profesional es más delgado, por ejemplo, todos tenemos compañeros de trabajo en nuestras redes sociales, por lo que de alguna u otra forma nos mantenemos informados de lo que pasa en la oficina. Por otro lado, está el auge de Whatsapp, plataforma que de a poco va cobrando protagonismo en nuestro país y a través de la cual los chilenos siguen comunicados con amigos y colegas”.

La gerente de marketing de Randstad cree que el porcentaje de personas conectadas durante las vacaciones va a seguir creciendo, “especialmente si consideramos que las nuevas generaciones, llamados nativos digitales, están entrando con fuerza al mercado laboral, por lo que en algunos años más los representantes de la Generación X y Z serán los grandes protagonistas en las compañías”, analiza.

A nivel mundial, 47% de los trabajadores se mantiene informado de lo que está pasando en el trabajo durante las vacaciones y 36% va un poco más allá y revisa el correo electrónico de forma continua. Los empleados menores de 24 años son los que más consideran que su empleador espera que estén disponibles 24/7 (37% vs 28% en promedio) y son los que más se mantienen informados sobre el trabajo cuando están fuera (55% vs 47% en promedio), a pesar de que señalan no sentirse presionados.