En la Semana del Emprendedor, Jonathan Gómez Ceballos, enlace del Infotec con el sector empresarial compartió que en América Latina se crean muchas empresas, pero poca innovación.
La acción de invertir en la innovación arroja en el mediano y corto plazos beneficios como el de adelantarse a los competidores en conocimiento del mercado; significa reinventarse, crear nuevos servicios y estrategias de expansión y a la postre, termina por asegurar la vida de la empresa hasta una siguiente generación de mandos.
Jonathan Gómez Ceballos, enlace del Fondo de Información y Documentación para la Industria (Infotec) con el sector empresarial, sostuvo que está claro para la pyme que tomar a la innovación como una prioridad es diferenciarse de la competencia, marcar tendencia y estar a pocos pasos de acercarse a las grandes empresas en materia de expansión y supervivencia.
“Invertir en innovación significa ponerse a la par de la competencia, llamar la atención de los consumidores; que el resto de las empresas nos intenten copiar. El problema es que la pyme mexicana no intenta innovar o no cuenta con la capacidad (financiera) para hacerlo. Es en ese punto cuando hay hacer a un lado el cúmulo de problemas y buscar soluciones para no quedarse obsoletos”, comentó el funcionario.
Durante una presentación en la Semana del Emprendedor, Gómez Ceballos compartió que tanto en México como en América Latina se crean muchas empresas, pero poca innovación, de ahí que la mortandad de emprendimientos sea causada por falta de capital y de las innovaciones.
"A la innovación no hay que verla como algo que sólo hacen los grandes laboratorios. Algo ocurre que en Latinoamérica no se ve tanto a la innovación como sí en otras regiones. América Latina y México, sus Pymes, deben entender que una idea, un emprendimiento, puede generar empleo y riqueza para los emprendedores y las economías”, comentó.
La innovación no quiere decir que una Pyme debe invertir millones de pesos en tecnología o prácticas empresariales que potencien su expansión. La innovación es además de un cambio físico y mejoras de bienes o servicios, “también el cambio del chip de la pequeña y la mediana empresa”.
Cinco Razones para apostar a la innovación
La diferenciación es parte de la innovación. Una empresa, sin importar su tamaño, que continuamente reinventa sus estrategias de mercadeo o lanza productos novedosos siempre llamará la atención del consumidor.
El uso de las nuevas tecnologías puede ayudar a la Pyme a marcar tendencia; utilizar y diseñar antes que nadie maneras de poner internet a su favor provocará que el competidor no pueda seguirle el paso tan rápidamente.
La motivación también es innovación, dijo Gómez Ceballos. La empresa siempre debe propiciar que el trabajador es parte de la misma, que puede crecer con ella. Además, cuando se invierte en los empleados se envía un mensaje hacia adentro y hacia afuera de que la empresa se muestra preocupada por mantenerse al día y responsable por sus empleados, aspectos que derivan en una mejor imagen de sí misma.
La innovación permite a las empresas reportar mejores ingresos, dado que el consumidor siempre preferirá los productos o servicios novedosos ante los cotidianos
“México es ya el decimocuarto generador de patentes. Pero aún nos hace falta ser un poco más innovadores, más atrevidos. No hay que considerar a la innovación como un gasto. La inversión es igual a innovación, es igual a explotar las ideas y es la viabilidad de la empresa a futuro, es su futuro”, expuso Jonathan Gómez Ceballos.