De nombre desconocido, el renovado software para computadoras busca terminar con la molestia que provocó Windows 8 en los usuarios.
Microsoft develará el martes el nuevo nombre de su producto más conocido, cuando ofrezca el primer vistazo oficial a su último sistema operativo Windows.
El proyecto, conocido en los últimos años como “Umbral” en el seno de la compañía de software y “Windows 9″ en el exterior, es probable que reciba un nombre totalmente nuevo o que simplemente se llame Windows, indicaron analistas, antes de su lanzamiento completo en 2015.
Cambiar la denominación es una forma de simbolizar la nueva dirección y estilo de Microsoft, que se está apartando de su agresiva fijación por Windows y las computadoras personales, la marca registrada del anterior presidente ejecutivo Steve Ballmer. El nuevo y más calmado énfasis busca vender servicios en todos los dispositivos y es abanderado por el nuevo jefe, Satya Nadella.
El fin del Windows más resistido
El cambio también representa un deseo de acabar con el resentimiento generado por Windows 8, un ambicioso intento de rediseño dirigido a los usuarios de las tabletas que terminó confundiendo al vital mercado que usa mouse y teclados.
“Windows 8 no fue un momento brillante para Microsoft”, dijo Michael Silver, analista de la firma de investigación tecnológica Gartner. “Probablemente el mayor tema con el que hay que lidiar es con la valoración negativa de la marca en el nombre”, agregó.
Muchos usuarios se indignaron con la desaparición del menú incluido en el botón de inicio y la introducción de una colorida parrilla de cuadros con aplicaciones que fue definida como la interfaz del usuario moderno, aun cuando pudieran cambiar fácilmente al escritorio tradicional.
A juzgar por las recientes filtraciones en internet, que Microsoft no ha intentado desacreditar, el menú del botón de inicio regresará en el próximo Windows, con una opción de pasar a los azulejos de colores si se prefiere.
Pero aún debe ser resuelta la molestia de alternar entre la moderna interfaz y el escritorio clásico, por ejemplo para usar la versión completa del software de la hoja de cálculo Excel.
“El esquizofrénico comportamiento entre la interfaz del usuario moderno y el escritorio de Windows debe desaparecer”, señaló David Johnson, analista de la firma de investigación tecnológica Forrester.
La nueva visión de Nadella
La compañía con sede en Redmond, Washington, declinó hablar sobre el nuevo nombre o qué desvelará el martes. Sólo adelantó que será una “discusión” sobre hacia dónde va Windows en un evento que celebrará en un estiloso local de San Francisco.
La elección del nombre y el lugar escenifican que Microsoft tiene un perfil más bajo y humilde con Nadella, que pretende reconstruir el respeto en la Bahía y en Silicon Valley mientras se aleja del computador personal (PC) y se sumerge más en el mundo computacional móvil diseñado por Apple y Google.
El lema de Nadella es “móvil primero, nube primero”, y, aunque no acudirá al evento de San Francisco (estará de viaje en Asia), el eslogan presidirá el acto.
“Es una plataforma de lanzamiento y un catalizador de la visión holística de Nadella sobre la nube en los próximos años”, dijo Daniel Ives, analista del banco de inversión FBR Capital Markets. “Windows 9 es un producto que puede cambiar potencialmente el juego para Microsoft”.
Windows 8 no fue un momento brillante para Microsoft”, dijo Michael Silver, analista de la firma de investigación tecnológica Gartner
Nadella ya aceptó la idea de que la ventas de las PC se estabilizaron, junto con las de Windows. Con la explosión de los teléfonos avanzados y las tabletas, Windows está presente solo en el 14% de los dispositivos computacionales vendidos el año pasado, según Gartner.
Su respuesta ha sido centrarse en vender servicios de alta calidad, como la gama de aplicaciones de Office o el almacenamiento de documentos en la nube, en cualquier dispositivo o sistema que se esté utilizando.
“Microsoft está pasando de ser una compañía ‘Windowscéntrica’ a una que es ‘servicioscéntrica’”, comentó Silver, de Gartner. “Debe ser así. Es probable que los ingresos de Windows bajen y la tarea de Microsoft es sustituirlos con ingresos de servicios en todo tipo de plataformas”.
“Microsoft construyó su negocio siendo muy bueno dándole a la gente lo que necesitaba en su momento, por ejemplo Excel en los años 90″, dijo Johnson, de Forrester. “Microsoft tiene que volver a eso, innovando y creando cosas que la gente encuentre indispensables”.