El hardware de encriptación imposibilita la intercepción de datos de teléfonos inteligentes, tabletas y computadores.
Aunque muchos usuarios no lo tengan en cuenta los teléfonos inteligentes y tablets, pueden ser una puerta abierta a la información confidencial. Por este motivo, los denominados “hacker killers” o nuevos sistemas de protección de datos fueron uno de los claros protagonistas del Mobile World Congress (MWC), que se realizó la semana pasada en Barcelona.
“Estamos todavía en una época de adaptación, en donde la gente no es tan desconfiada frente a un teléfono inteligente como ante un computador”, señaló el analista de la empresa de programas antivirus Kaspersky Lab, Vicente Díaz. De ahí que la captación de datos personales a través de los nuevos dispositivos pueda ser más fácil y que la industria del sector se haya movilizado para presentar nuevas soluciones de seguridad.
Uno de los sistemas que fue presentado en el congreso fue, Nume, de la firma CTS, que consiste es un hardware de encriptación, que imposibilita la interceptación de las comunicaciones procedentes de teléfonos inteligentes, tabletas y ordenadores.
Físicamente, es un aparato similar a un móvil de mediano tamaño, que funciona con “bluetooth” o cable y debe estar cerca del teléfono o de la tableta cuando se usan para hablar, enviar mensajes de texto, o correos electrónicos.
El director general de CTS, el ruso Anatoly Klepov, aseguró a la agencia Efe que casos de espionaje, como el sufrido por la modelo Kate Moss o el robo remoto de fotos del móvil de Scarlett Johansson, serían “imposibles” con el sistema presentado por su empresa.
También en el marco del MWC, Kaspersky Lab exhibió una protección avanzada para tabletas con sistema operativo Android, tanto contra el software malicioso y fraudulento como para proteger los datos personales, en caso de robo.
La seguridad de los dispositivos fue uno de los temas de debate en el congreso, que reunió a 67.000 visitantes de 205 países, con lo que batió un nuevo récord de participación, y tuvo un impacto económico de más de 300 millones de euros (US$400 millones), 25 millones (US$33,2 millones) más que en 2011.
Entre los participantes, se destacaron 3.500 altos ejecutivos de las operadoras de telefonía móvil más influyentes, compañías de software y proveedores de equipos.
El encuentro ha sido un congreso de continuación, sin rupturas tecnológicas y, a diferencia de otros años, sin grandes anuncios, en el que uno de los asuntos más llamativos fue el movimiento de las operadoras para volver a crecer en ingresos con el anuncio del fin de las subvenciones a los móviles.
Desde el punto de vista empresarial, destacó Nokia, que sigue en el pabellón de las aplicaciones, pero que ha vuelto al tablero demostrando que tiene tecnología y capacidad suficiente para competir en el nuevo mercado con teléfonos móviles inteligentes de bajo precio con su sistema Symbian. Así, Su Nokia 808 PureView, también Symbian, con una cámara de 41 megápixeles ha hecho que sea “tema del momento” en Twitter, además de la noticia y el vídeo más vistos en internet en numerosos portales.
En las jornadas, y en sintonía con esta globalidad en la que se mueve el sector, el presidente de Telefónica en América Latina, Santiago Fernández Valbuena, destacó la importancia de que puedan ofrecerse teléfonos inteligentes a menos de US$100 en mercados emergentes.
Las previsiones indican que en los próximos cinco años los países emergentes habrán superado a los desarrollados en número de smartphones y que el tráfico IP se va a multiplicar por siete en Latinoamérica, con la mayor tasa mundial de crecimiento medio anual.