Una encuesta realizada por Glassdoor ha demostrado que los mayores salarios son para los hombres, los cuales superan en ocasiones el doble que el de las mujeres cada año.
Por Alexis Gómez para Mediatelecom Agencia Informativa. Muchas compañías de tecnológicas han admitido que su fuerza de trabajo no es tan diversa como debería, y se están esforzando para balancearlo. Hasta la fecha, la demografía de las empresas está fuertemente inclinada hacia los blancos y los hombres.
A partir de los pocos estudios que se han realizado sobre género, estamos empezando a tener una mejor idea de las diferencias específicas que existen entre salarios de hombres y mujeres en empresas de tecnología. Sin embargo, una encuesta realizada por Glassdoor, sobre salarios medios en Silicon Valley, ha demostrado que los mayores salarios son para los hombres, los cuales superan en ocasiones el doble que el obtenido por mujeres cada año. En Google, por ejemplo, un hombre ingeniero senior de software hace 19% más que su contraparte femenina.
De acuerdo al estudio, el salario está fuertemente condicionado a la experiencia de cada empleado, donde existen grandes diferencias entre hombres y mujeres en términos de años trabajados, incluso dentro del mismo trabajo. Un ingeniero de software senior masculino en Google tiene, en promedio, casi una década más de experiencia en comparación con sólo 7.6 años de una ingeniera con el mismo título. La experiencia es probablemente un factor que ayuda a impulsar hacia arriba los salarios masculinos en relación con las mujeres.
Sin embargo, aunque las mujeres ha demostrado tener más experiencia que los hombres, la brecha salarial no cambia sustancialmente a su favor, como se podría esperar. Por ejemplo, las ingenieras de software en Cisco tienen en gran medida más experiencia laboral que los hombres, nos obstante, esto no se ha reflejado en sus salarios. Una mujer ingeniera de nivel medio en una empresa con casi un año y medio más de experiencia hace apenas 162 dólares más por año, según datos de Glassdoor.
En conclusión: la experiencia importa, pero en comparación con los hombres, las mujeres deben tener mucha más experiencia para poder ser merecedoras de un pago adicional.