Si bien la mayor parte de la carga del próximo lanzamiento son los suministros diarios para la Estación Espacial Internacional, también se han añadido otras cargas como parte de distintos proyectos.
Cromo - El Observador. Tras la explosión unos meses atrás de uno de sus cohetes, que tuvo consecuencias económicas y supuso la pérdida de varios proyectos, la compañía de Elon Musk consiguió recuperarse, lanzando su primer cohete desde aquel accidente el pasado 14 de enero.
Ahora, SpaceX se prepara para un nuevo lanzamiento el 18 de febrero. Si bien la mayor parte de la carga son los suministros diarios necesarios para mantener a la tripulación de la Estación Espacial Internacional, también se han añadido otras cargas como parte de distintos proyectos. Entre ellos se destaca una superbacteria letal.
Los astronautas tendrán que convivir con lo que se conoce como un "superbug" denominado MRSA (Methicillin Resistant Staphylococcus Aureus), una bacteria resistente a los antibióticos que puede resultar mortal.
En caso de ser infectadas, las personas sufren dolorosas hinchazones en la piel, además de verse afectados sus huesos, articulaciones e incluso su sangre. Esta clase de infección mata anualmente a más personas que el VIH, la enfermedad del Parkinson y los enfisemas juntos.
El objetivo de los científicos al enviar esta superbacteria al espacio es investigarla en gravedad cero, ya que en esas condiciones se pueden acelerar sus mutaciones y comprobar su progresión de manera más rápida. Esto acelerará el desarrollo de medicamentos contra sus efectos.