En América Latina, Chile se corona como el país con mayor porcentaje de personas usando internet (53,9%), Brasil como el que más conexiones móviles tiene (20,9 por cada 100), y Uruguay lidera en porcentaje de casas con internet (39,4%).
Es un hecho, la banda ancha cambió el panorama de los comunicaciones a nivel global, así lo demostró el primer informe de La Comisión de Banda Ancha de la ONU: The State of Broadband 2012: Achieving Digital Inclusion for All.
Este documento entrega un análisis sobre el despliegue del servicio de banda ancha a nivel mundial, el progreso, penetración, y la llegada en los 117 países evaluados. "Las redes de banda ancha y servicios están transformando nuestra forma de vida. La Comisión de Banda Ancha se compromete a garantizar que los beneficios de la banda ancha está disponible para todos ", explicó Hamadoun Touré, Secretario General de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), una de las organizaciones que trabajó en el estudio.
El informe fue presentando durante la sexta reunión de la Comisión de Banda Ancha, en donde el Secretario General, Ban Ki-moon, aseguró que la banda ancha se ha transformado en un elemento que tiene potencial para generar avances en los tres pilares del desarrollo sostenible: “la prosperidad económica, la inclusión social y la sustentabilidad ambiental”.
Revelaciones y nuevos beneficios
Según el informe, el acceso a internet en los hogares ha crecido fuertemente, junto con el uso individual, lo que desemboca en una amplitud mucho mayor de personas que tienen la posibilidad de usar de forma efectiva la herramienta. Esta tendencia se estaría registrando con más fuerza desde el 2011, ya que las suscripciones de banda ancha móvil crecieron el doble que las conexiones de banda ancha fija.
Atrás quedó la afirmación de que internet sirve sólo para comunicarse, o así lo aseguró el informe: la banda ancha habría mejorado la vida de las personas en todo el mundo, ya que esta herramienta es utilizada para áreas como la salud, educación, transacciones bancarias, y también la promoción de innovación, cada vez con mayor fuerza.
Gobierno digital
A estos beneficios se suman los vínculados al sector público y privado. De acuerdo al estudio, además de agregar una política mucho más clara del despliegue de banda ancha en cada país, ambos sectores se han visto en la necesidad de modernizarse, para ofrecer muchos más servicios (link) en línea.
A modo de guía, la UTI también entregó un listado de acciones para los gobiernos, en donde se indica cómo acelerar el despliegue de la banda ancha, mejorar su infraestructura e implementar políticas de regulación (instalación, opción de acceso, etcétera), luchar para ofrecer acceso a banda ancha a quienes no tiene ingresos para pagar por estos servicios, entre otros.
Cifras de temer
A nivel goblal, 32,4% de las personas tienen acceso a internet móvil. De los países con más usuarios conectados está Islandia, Noruega, los Países Bajos, Suecia, Luxemburgo y Dinamarca, todos con más del 90% de sus habitantes conectados.
Bajo ellos están los países nórdicos, que también fueron bien evaluados, ya que registraron más de 75% habitantes conectados a la red: Nueva Zelanda con 86% de su población, Corea del Sur con 83,8%; Alemania con 83%; Reino Unido tiene 82%; Francia 79,6%; Japón 79,5% y EE.UU. Registró 77,9% de usuarios conectados.
Un poco más abajo quedó el continente africano. Chad tiene sólo 1,9% de usuarios en línea, Madagascar 1,9%, Guinea 1,3%, Níger 1,3%, Somalia 1,3%, República Democrática del Congo 1,2%, Burundi 1,1% y Etiopía 1,1%), Birmania 1% y Timor Oriental con sólo 0,9%.
El caso latinoamericano
El porcentaje de personas que poseen conexión a internet banda ancha en América Latina no estuvo cerca del primer mundo, pero sí del promedio global. La región presentó un 34% de personas conectadas, superando por poco el 32,4% mundial pero con claras perspectivas de crecimiento, tomando en cuenta el boom de internet que se ha experimentado.
Para entrar en el detalle del estudio, el país con mayor porcentaje de internautas en la región fue Chile con 53,9%, seguido por Uruguay con 51,4%; Argentina con 47,7%; Brasil con 45%, Panamá con 42,7%, Costa Rica con 42,1%, Colombia con 40,4%, y Venezuela con 40,2% de habitantes conectados a la red.
Mucho más abajo está Paraguay con 23,9%, Cuba con 23,2%, El Salvador 17,7%, Honduras con 15,9%, Guatemala 11,7% y Nicaragua con 10,6%.
En otros resultados relevantes, Brasil fue el que más conexiones móviles de banda ancha presentó, con 20,9 suscripciones por cada 100 habitantes, detrás estuvo Chile con 17,1 y Argentina con 11,7.
A nivel de conexiones de banda ancha en el hogar, Uruguay está en primer lugar con 39,4%, seguido por Chile con 38,8 y Argentina con 38.
Pero este estudio no sería el único en reconocer el fuerte crecimiento del acceso de banda ancha. Durante el año se han publicado otros informes que arrojan resultados similares.
Según la investigación realizada por Our Mobile Planet -en donde constantemente se puede acceder a información sobre la telefonía móvil a nivel global- hace un buen rato el acceso a teléfonos capaces de generar acceso a internet es una tendencia en la región.
El gigante del continente, Brasil, tiene más smartphones que Alemania y Francia; México tiene el doble que los canadienses. ¿De cuántos súper teléfonos estamos hablando? Brasil cuenta con 27 millones de usuarios, mientras que México alcanza los 23 millones.
La inclusión y los grandes cambios tecnológicos
Estos resultados serían influenciados, según la UIT, por el crecimientos de la venta de smartphones, que promoverían la necesidad de pagar por servicios de internet móvil. A nivel global, esta área supera los 6.000 millones de dispositivos a principios de 2012. "Dentro de poco, la mayoría de la población del planeta sostendrá en sus manos un aparato con mayor capacidad que los ordenadores más poderosos de los años 80", destaca la UIT en el informe.
En definitiva la conectividad a nivel mundial es una realidad palpable. Ya sea a través de una conexión fija en el hogar, oficinas de trabajo o desde un teléfono con la tecnología suficiente, son las armas para que cada día más siga creciendo el acceso a este servicios que dejó de ser un lujo hace sólo un par de años. Lo que queda por ver es que el aumento no cese (como aseguran en el informe) y los beneficios relacionados a otras áreas como la salud y la educación se transformen en protagonistas de los próximos estudios.
*Edición: la integración de un dato que no habíamos tomado en cuenta nos obligó a cambiar el 35,1% por el 34% actual.