Liu Yang nació en la provincia de Henan y se incorporó al ejército en 1997. Ella se convirtió en una piloto veterana antes de ser reclutada como candidata a astronauta en mayo de 2010.
La primera astronauta mujer de China, Liu Yang, afirmó hoy que las mujeres tienen ventajas únicas para trabajar en el espacio y que sin su participación la exploración espacial sería incompleta.
"La paciencia, sensibilidad y simpatía inherentes de las mujeres implican que tengan más posibilidades de evitar conflictos, en especial en las apretadas condiciones de la mayoría de las naves espaciales", dijo Liu, en el primer "Día del Espacio" de China.
El gobierno declaró recientemente al 24 de abril, el aniversario del lanzamiento del primer satélite del país hace 46 años, como una ocasión anual para difundir los logros chinos en el espacio. Liu hizo los comentarios cuando China se prepara para enviar astronautas al espacio durante periodos mucho más largos y se espera que una estación espacial tripulada china empiece operaciones alrededor del 2020.
"Las mujeres tendrán un papel más importante cuando se pase más tiempo en el espacio", según Liu.
DESDE LOS PIES VENDADOS HASTA EL VUELO SIN ATADURAS
China fue el tercer país en enviar a una mujer al espacio con su propia tecnología. El vuelo de Liu fue parte de un giro destacado en las actitudes chinas hacia las mujeres.
Durante miles de años de la sociedad feudal, las mujeres tuvieron un bajo estatus. Apenas hace 100 años, muchas mujeres eran criadas para soportar el dolor de vendarse los pies para satisfacer a los hombres y de compartir a su esposo con otras mujeres.
No fue sino hasta el establecimiento de la República Popular China en 1949 y que el presidente Mao Zedong dijera que las "mujeres sostienen la mitad del cielo" que las cosas empezaron a cambiar.
En la actualidad, Liu cree que las mujeres están listas para "sostener la mitad del espacio" y que ella estuvo "en el lugar correcto en el momento correcto" para aprovechar que se permitiera a las chinas asumir un papel mayor.
Liu nació en la provincia de Henan y se incorporó al ejército en 1997. Ella se convirtió en una piloto veterana antes de ser reclutada como candidata a astronauta en mayo de 2010.
NUNCA QUEDARSE ATRÁS
Liu voló al espacio a bordo de la nave Shenzhou-9 en junio de 2012. Su presencia en la nave espacial requirió una serie de ajustes al programa espacial de China para satisfacer las necesidades de una mujer.
"Tuvieron que diseñarse trajes espaciales, ropa interior y trajes deportivos nuevos para las astronautas. Los dispositivos de excrementos también son diferentes para nosotras", indicó Liu.
Hasta la fecha, más de 50 mujeres han viajado al espacio. "El mundo está hecho de dos géneros; el espacio no permite ninguna excepción. La exploración espacial sería incompleta sin la participación de las astronautas y China nunca debe rezagarse en el envío de mujeres al espacio", opinó Liu.
Después de dos años de entrenamiento, Liu se ha vuelto una persona fuerte. "Cada sesión está destinada a estirar a uno hasta sus límites y yo me fortalezco cada vez que me desafío a mí misma".
Liu aspira a tener un lugar en la estación espacial china. Está desesperada por estar a bordo de lo que describió como "la gran villa de China en el espacio".