La noticia ha generado tal preocupación, que en mayo pasado, el Congreso de Estados Unidos llevó a cabo una serie de audiencias en las que participaron funcionarios del gobierno, académicos y empresarios de la industria tecnológica, quienes coincidieron en rechazar que la ONU controle a la red de redes.
La Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU por sus siglas en inglés) comienza en los próximos días la primera de sus dos grandes reuniones de fin de año, en las que abordará una polémica propuesta de Rusia y China para que ese organismo de Naciones Unidas (ONU) se encargue de regular las actividades que se realizan por medio de internet.
La iniciativa, llamada Código Internacional de Conducta para la Seguridad de la Información, fue presentada ante la ONU en 2011 y pretende sistematizar y estandarizar las reglas para mantener la ciberseguridad, y para hacerlo propone dar a la ITU poderes para acceder a la información que fluye en el ciberespacio.
Adiós a internet libre
Una de las voces más críticas hacia esa posibilidad ha sido la de Vint Cerf, científico estadunidense conocido como “el padre de internet”, quien junto con Robert Kahn creó los protocolos TCP/IP que hicieron posible su funcionamiento.
Cerf no dudó en afirmar ante el Congreso estadunidense que “un control de la ONU conlleva profundas y potencialmente peligrosas implicaciones para el futuro de internet y de todos sus usuarios. Si no prestamos atención (…) los usuarios del mundo se arriesgan a perder una internet libre y abierta que ha dado tanto a tantos.”
En un ensayo publicado en el diario estadunidense The New York Times, Cerf fue más allá al afirmar que el intento de la ITU por controlar la web tiene la intención oculta de justificar la existencia de ese organismo, que está siendo rebasado por el desarrollo exponencial de la red de redes.
Para la Sociedad de Internet (ISOC por sus siglas en inglés, considerada como el ala académica de internet), las decisiones que comiencen a tomar los gobiernos de los 193 países que integran la ITU a partir del próximo fin de semana podrían redefinir el entorno regulatorio internacional de internet y las telecomunicaciones del siglo XXI, lo que tendrá un impacto sobre cómo la gente del mundo se conectará.
La ISOC ha externado que una de sus mayores preocupaciones es que, bajo el argumento de mantener la ciberseguridad, sea sacrificada la privacidad de los usuarios, lo que podría incluir acceso por parte de los Estados a información que hoy es considerara como privada, ya sea que sus dueños sean ciudadanos u organizaciones.
Sólo los estados miembros de la ITU tendrán derecho a participar en la votación tanto en la reunión que tendrá lugar del 14 al 18 de octubre en Dubai, como en la que se realizará en diciembre, para abordar, entre otros, el tema de la web.
Seguridad
Otro punto a tratar será el de la ciberseguridad, que incluirá el análisis de las amenazas a la seguridad nacional en general; la mitigación de riesgos que representan los ciber ataques mayores coordinados, especialmente a nivel nacional, y el fortalecimiento de la cooperación internacional en respuesta a las amenazas crecientes.
El organismo reconoce que los ataques masivos por medio de virus informáticos han dañado a empresas públicas y privadas y pueden ser un arma para la delincuencia organizada.