La plataforma de gestión de infraestructura de la nube pública y privada permitirá a las organizaciones desarrollar y escalar aplicaciones en cualquier infraestructura.
Por Sol Park, desde Boston. El momento que culminó el Red Hat Summit 2019 fue el apretón de mano entre el CEO de Google, Satya Nadella, y su contraparte de Red Hat, Jim Whitehurst. Con el término de la era de “Linux es cáncer”, ambas empresas lanzaron el proyecto conjunto Azure Red Hat OpenShift, que combina las soluciones de virtualización de Red Hat con la capacidad de almacenamiento público de Microsoft Azure.
Con este proyecto, Red Hat añade un gigante más a su lista de empresas socias proveedores de cloud como Amazon, Google, IBM y Alibaba.
“Es un hecho que todos reconocen a Linux como el sistema operativo que va a acelerar la innovación de mañana y es por eso que existe la nube pública”, dijo Stefanie Chiras, gerente general de la unidad de Red Hat Enterprise Linux (RHEL), en una conversación con la prensa. “Y creo que todos quieren participar en esta comunidad y están viendo cómo pueden aportar valor”, agregó.
Y OpenShift 4 es la última actualización de la plataforma de gestión de infraestructura de la nube privada y pública de Red Hat. Según esta empresa de código abierto, este servicio simplifica las implementaciones híbridas y multinube para acelerar la forma en que las organizaciones de TI implementan nuevas aplicaciones. La actualización estará disponible desde junio de este año.
Esto significa que los usuarios podrán trabajar en distintos proveedores de nubes públicas como también con sus propios data center privados de forma fluida y sin preocuparse con construir una infraestructura para cada una de ellas. La actualización es bienvenida por los desarrolladores de TI, ya que, según un informe de IDC, para el año 2020, más del 90% de las organizaciones internacionales habrán implementado una estrategia multinube.
Según Chiras, para la era de la transformación digital, es esencial tener una infraestructura de TI que permite a las empresas trabajar en cualquier tipo de servicio de almacenamiento: “Es importante realizar una decisión estratégica para que tu espacio fundacional no limite tu capacidad de escoger en el futuro ya que, en uno o en cinco años, cuando empiezas a progresar en pesadas cargas de trabajo, como Inteligencia Artificial o Deep Learning, podrás querer estar en uno u otro servidor”.
La otra clave de la actualización de la plataforma es tiene como base el RHEL 8, el otro gran lanzamiento realizado durante el evento de Red Hat. Esto significa que los usuarios podrán actualizarse automáticamente y trabajar en un ambiente de mayor seguridad y auditabilidad.
Además, incluye Red Hat OpenShift Certified Operators, que ofrece en la nube híbrida un amplio conjunto de aplicaciones como servicio (ASPs) confiables y creadas por la comunidad de Red Hat.