Conoce la iniciativa global -presente en Latinoamérica- que busca fortalecer el acceso a la comunicación para aquellos afectados por situaciones de emergencias, ayudando a reducir la pérdida de vidas.

Los desastres naturales, como los incendios forestales, los terremotos o las inundaciones, no son un fenómeno extraño para nuestra región. Año a año Latinoamérica debe superar muchas de estas catástrofes, no sólo con el desafío de brindar ayuda a los damnificados, sino que también con la problemática de mantener sus redes de comunicaciones. ¿Cómo puede ayudar la tecnología a mantener a las víctimas en contacto?

Este fue el tema de discusión del reciente evento “Nos importa Chile”. Una iniciativa que reunió a las principales empresas de telecomunicaciones de este país (Claro, Entel y Movistar), a la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), junto la asociación global de todo el ecosistema móvil, GSMA, para la firma de la Carta de Conectividad Humanitaria.

¿Cuál es el objetivo de este documento? Esta iniciativa global busca fortalecer el acceso a la comunicación e información para aquellos afectados por situaciones de emergencias, ayudando a reducir la pérdida de vidas y contribuir positivamente a la respuesta humanitaria.

La Carta de Conectividad Humanitaria fue lanzada durante el Mobile World Congress 2015 y ya cuenta con más de 108 operadores móviles firmantes cubriendo más de 77 países. Dentro de nuestra región, la iniciativa ya fue lanzada en Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y República Dominicana. Además, se espera que el proyecto seguirá su recorrido por toda la región.

En el marco de este evento y para ahondar en el tema, en AETecno conversamos con Sebastián Cabello, Director General para América Latina de la GSMA, quien nos explicó la importancia de poder comunicarse en medio de una catástrofe de este tipo.

- ¿Cuáles son las principales sugerencias para comunicarse con terceros después de un desastre natural? Por ejemplo, un terremoto
 
Siempre la mejor recomendación en tiempos de crisis humanitarias o desastres naturales es utilizar los mensajes de texto SMS, ya que es el método más efectivo para conectarse con tus seres queridos y familiares y, sobre todo, porque no sobrecarga la red móvil evitando la congestión del servicio.

- ¿La forma de comunicarse varía según el tipo de desastre natural?
 
Sea un incendio, terremoto, tsunami, erupciones volcánicas o inundaciones, si una crisis genera que mucha gente se encuentre afectada y quiera comunicarse con sus familiares o seres queridos, eso puede congestionar la red y por eso es recomendable utilizar los SMS.

- ¿Cuál es el estado general de la región para responder a los problemas de comunicación después de desastres naturales?
 
América Latina es una región muy diversa en la cual es muy difícil generalizar. Pero en las últimas décadas, la letalidad de los desastres naturales en la región disminuyó gracias a los avances en los sistemas de salud, las mejoras en las alertas tempranas y la mayor eficiencia de la ayuda humanitaria. 

A nivel infraestructura de telecomunicaciones, los operadores móviles han realizado inversiones muy fuertes que permitieron que la cobertura móvil supere el 90% en casi todos los países de la región y se espera que inviertan más de US$76 mil millones en los próximos 5 años, ampliando aún más la cobertura de internet móvil y 4G. 

Todavía la región tiene mucho por invertir en mejorar la electricidad, agua y transporte para asegurarse que la infraestructura resiliente esté lista antes de un desastre. Pero se puede asegurar que se invirtió mucho en el despliegue de infraestructura de telecomunicaciones en los últimos años, pese a las trabas municipales, y en mejorar los planes de restitución del servicio incluyendo la dotación de autonomía energética a las estaciones base críticas.

 
- ¿Qué puntos deben mejorar Chile y Latinoamérica para tener buenos sistemas de comunicación luego de desastres naturales? 
 
A través de la Carta de Conectividad Humanitaria, la GSMA está dedicada a lograr escalar y estandarizar las actividades de preparación y respuesta en toda la industria para permitir una respuesta más predecible en toda la región. Ese es uno de los desafíos principales, al mismo tiempo que se deben fortalecer las alianzas entre la industria móvil, los Gobiernos y el sector Humanitario. 

Muchas veces no es una cuestión tecnológica o de inversión sino de tener una buena coordinación y colaboración entre todos los actores involucrados. 

También hay que seguir trabajando en detalle y con un enfoque de mejora continua en los protocolos y planes de acción de restitución del servicio con modelos de monitoreo del impacto, priorización y ejecución de actividades de restauración.
 
- ¿Existe alguna medida que podamos hacer a nivel regional para superar estos desafíos? 
 
El fortalecimiento de las infraestructuras y de las instituciones que lideran los sistemas de respuesta ante desastres es un proceso que cada país debe llevar adelante por sí mismo y no existen soluciones regionales mágicas. Sin embargo, es clave estrechar todos los vínculos institucionales a nivel regional e internacional. 

En ese sentido, es importante estar conectados con la Red Humanitaria Internacional, la cual coordina la recepción de ayuda internacional en caso de desastres, la Red Interamericana de Mitigación de Desastres establecida por la OEA y, en el caso chileno, el Sistema de Alerta de Tsunamis del Pacífico, establecida por la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de UNESCO para monitorear las mareas y otros fenómenos asociados con las variaciones anormales del nivel del mar, como es el caso de los tsunamis.