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Reguladores de la UE piden a Google detener su nueva política de privacidad
Viernes, Febrero 3, 2012 - 13:39

"Los cambios en su política de privacidad pueden afectar a muchos ciudadanos en la mayoría o en todos los países miembros", dijo El Grupo de Trabajo del Artículo 29 a Larry Page en un escrito este jueves.

Bruselas. El Grupo de Trabajo del Artículo 29 (Article 29 Working Party) escribió a Google para solicitarle que interrumpa la introducción de su nueva política de privacidad, alegando que tiene que investigar si las propuestas protegen suficientemente los datos personales de los usuarios. Google dijo en enero que iba a simplificar sus regulaciones de privacidad, unificando 60 guías en una única política que funcionará en todos sus servicios, incluidos YouTube, Gmail y su red social Google+.

El Grupo de Trabajo del Artículo 29 es un organismo independiente que aúna a las autoridades de protección de datos de cada uno de los 27 países de la Unión Europea y de la Comisión Europea, quienes señalaron que habían de examinar los planes de Google más en profundidad antes de que entre en vigor la política del grupo el 1 de marzo.

"Dada la amplia gama de servicios que ofrecen, y la popularidad de estos servicios, los cambios en su política de privacidad pueden afectar a muchos ciudadanos en la mayoría o en todos los países miembros", indicó el grupo al consejero delegado de Google, Larry Page, en un escrito este jueves.

"Nos gustaría comprobar las posibles consecuencias para la protección de datos personales de estos ciudadanos de forma coordinada", indicó, explicando que la autoridad francesa de protección de datos estaría a cargo de la investigación.

"A la luz de lo expuesto arriba, pedimos una pausa en el interés de asegurar que no puede haber malentendidos sobre los compromisos de Google con los derechos de la información de sus usuarios y los ciudadanos de la UE, hasta que hayamos completado nuestro análisis", agregó.

La comisaria europea encargada de la protección de datos, Viviane Reding, celebró la decisión, diciendo que era necesario establecer que las reglas sobre datos de la UE se aplicaban firmemente.

"La Comisión pide por ello que las autoridades de protección de datos de Europa se aseguran de que la legislación comunitaria se cumple plenamente en la nueva política de privacidad de Google", dijo en un comunicado. Google dijo que estas preocupaciones le han supuesto una sorpresa.

"Informamos a la mayoría de los miembros del grupo de trabajo en las semanas previas al anuncio", dijo Al Verney, portavoz de Google en Bruselas.

"Ninguno de ellos expresó preocupaciones sustanciales en aquel momento, pero por supuesto que estamos encantados de hablar con cualquier autoridad de protección de datos que tenga dudas", agregó.

El director de política pública de Google ha explicado que la nueva política es un compromiso con la simplicidad, y que la compañía está intentado explicar sus normas de forma más concisa.

"Estamos explicando nuestra política de privacidad a los usuarios de estos productos con 85% menos de palabras", dijo Pablo Chávez en su blog este martes 31 de enero.

La nueva política explica qué información recopila Google de los millones de personas que usan sus servicios cada día, por qué se recoge esa información, cómo se usa y qué opciones se ofrecen para limitar la forma a la que se accede a ella y es actualizada.

Aunque Google no está obligada a esperar la conclusión de la investigación antes de aplicar su nueva política, la compañía se ha mostrado en el pasado tan cooperativa como le ha sido posible con las autoridades europeas.

La iniciativa de los reguladores llega días después de que la Comisión Europea fijara sus planes legislativos para modernizar sus normas de protección de datos, que tienen ya 17 años, estableciendo medidas mucho más rigurosas para la protección de los datos de los ciudadanos.

Según las nuevas normas, compañías de Internet como Google, Facebook y Yahoo tendrían que pedir a los usuarios si pueden almacenar y vender sus datos a otras empresas, como anunciantes, algo que es la fuente de todos sus ingresos.

Los usuarios de Internet pueden pedir también que sus datos sean borrados de las webs, el llamado "derecho a ser olvidado".

Autores

Reuters