Peter Cappelli, profesor de Management y director del Centro de Recursos Humanos de la Wharton School of Business de la Universidad de Pensilvania, es el autor de este volumen donde aborda uno de los temas más repetidos dentro del mercado laboral actual: la dificultad de los empleadores para hallar talento. Sin embargo, sus puntos de vista van a contracorriente de lo que repiten entidades consultoras y los managers de recursos humanos.
Why good people can’t get jobs: the skills gap and what companies can do about it está escrito por Peter Cappelli con el objetivo de tender un puente entre la actual generación de buscadores de trabajo, y los empleadores que los necesitan.
Para ello, Cappelli se remite primeramente a analizar las bases de la escasez de personal altamente calificado que dicen notar los empleadores. Sobre esto, el autor advierte que a diferencia de lo que dicen las firmas consultoras y aquellos encargados de buscar y contratar personal, quizás son las organizaciones empleadoras las que estén dando los pasos equivocados.
Cappelli alerta, haciendo referencia al mercado laboral estadounidense, pero con una lógica que bien podría aplicarse a otros escenarios, que en medio de un nivel tan alto de desempleo resulta sospechoso que las organizaciones no puedan encontrar buenos candidatos para sus puestos.
Entre sus argumentos fundamentales, llama la atención al uso de software que anulan de antemano los currículos de cientos de postulantes que quizás no emplearon las palabras claves pero que bien podrían ser la persona perfecta para la posición. Lo mismo, señala que muchos empleadores se muestran reacios a capacitar personal sin tomar en cuenta que mantener la plaza vacía puede resultar incluso más caro.
Entre las interrogantes que Cappelli se responde en su libro se encuentran algunas de que definen el cuestionamiento actual al tema: ¿existe realmente una falta de personal calificado? ¿Hasta qué punto la automatización ha dañado el proceso de selección de personal, que ya no es supervisado enteramente por los ojos y el juicio de un humano? ¿Qué tipo de entrenamiento funcionaría mejor tanto para la empresa como para el empleado?
Además de estas preguntas, Cappelli dedica un espacio especial a reflexionar acerca de la relación entre las escuelas, formadoras de talento, y las organizaciones empleadoras que deben recibirlo y emplearlo. ¿Cómo puede fluir mejor la comunicación entre ambas? ¿Cómo puede una ayudar a trabajar mejor a la otra?
La edición del libro corrió a cargo de la Wharton Digital Press, y fue publicado este 2012.