La firma surcoreana entregó 40% menos equipos de los que esperaba. Una cifra que, incluso, está 4 millones bajo las ventas del modelo S4.

Samsung no ha tenido un fin de año fácil. Si bien hace solamente unos días hablábamos de cómo iban a tener que reducir su cantidad de teléfonos al año, al parecer también deberán revaluar algunas de sus marcas más fuertes, como la siempre esperada serie Galaxy.

Según el medio The Wall Street Journal, el último equipo de este tipo, el Galaxy S5, no habría tenido una buena acogida por parte del público. De esta manera, este dispositivo no sólo habría alcanzado un 40% menos de unidades vendidas de las que esperaba Samsung, sino que además, habría alcanzado incluso 4 millones de unidades menos que su predecesor.

Uno de los mercados responsables de esta caída habría sido China, que disminuyó en un 50% con respecto al Galaxy S4. Sin embargo, la compañía todavía se mantendría fuerte en otras regiones, como es el caso de Estados Unidos.

Una de las principales razones ante estas bajas ventas sería la sobreestimación de Samsung con respecto a la cantidad de unidades que podía vender. En base a esto, la empresa estaría revaluando todo el portafolio de teléfonos que presentará para 2015, para evitar que este tipo de situaciones vuelvan a repetirse.