Es el más reciente capítulo de la guerra que sostienen los magnates Carlos Slim y Ricardo Salinas.
México. Una carta dirigida a la Comisión Federal de Mejora Regulatoria de México (Cofemer) se ha convertido en la nueva estrategia del Grupo Salinas en su búsqueda por asegurarse una mayor porción del mercado en el segmento de internet de alta velocidad; en ella, sostiene que la oferta de Telmex, su contendor, es perjudicial para los usuarios porque ofrece una conexión de baja velocidad (entre 2 y 5 megabits) a un precio muy alto, un poco más US$29.
Según la misiva, esta estrategia ha mantenido a los usuarios mexicanos de internet cautivos y le ha causado un profundo perjuicio al mercado mexicano, pues Telmex, la compañía de Slim, se ha negado a compartir su infraestructura, lo que ha acentuado su dominio en el segmento y ha perjudicado la libre competencia.
A través de la comunicación, Totalplay, empresa de Salinas, le pidió a la autoridad regulatoria que obligue a Telmex a compartir sus redes con los competidores, una medida que ya aplica para Telcel, el operador móvil que también pertenece al conglomerado de medios de Slim.
Ambos conglomerados mantienen una ardua disputa de varios años, acentuada recientemente por la intención de Slim de ingresar al segmento de televisión, en el cual TV Azteca, de Salinas, es uno de los jugadores más importantes.