Un exaflop será la capacidad de cálculo del proyecto japonés que planea destronar a Titan, la actual computadora más potente, ubicada en Estados Unidos.

Un trillón de operaciones por segundo decididamente ni se dice, ni se lee, y mucho menos se consigue fácil; sin embargo, es lo que se busca en el nuevo proyecto del gobierno japonés: Diseñar, a partir del 2014, la computadora más poderosa del mundo, con una potencia de cálculo de un exaflop (un trillón de operaciones por segundo).

Y como la carrera por la supremacía tecnológica es intensa y vertiginosa, Japón se lanza a ella con todos los requisitos para ser un competidor determinante. Por ello destina 100.000 millones de yenes (US$1.004,3 millones) al proyecto, con la intención de llegar primero a la meta del exaflop, que Estados Unidos y China panifican en sus proyectos para el 2020.

“Hay una gran diferencia entre las tecnologías que intentan ocupar el primer lugar y las que se conforman con el segundo”, recalcó el presidente de una comisión de expertos designados por el ministerio japonés, respecto a las metas de chinos y norteamericanos y las suyas propias.

En la actualidad la supercomputadora más rápidas del mundo se encuentra en Estados Unidos: Titan, de la empresa Cray y ubicada en el Laboratorio Nacional Oak Ridge del gobierno, con 17,59 petaflops, que equivalen a un poco menos de 18 mil billones de operaciones de cálculo por segundo. Es utilizada por el Departamento de Energía estadounidense para hacer investigaciones sobre energía, cambio climático y motores eficientes, entre otros temas.

En el caso del proyecto del gobierno de Japón, el superordenador resultante será utilizado en simulaciones para, por ejemplo, el desarrollo de medicamentos o la realización de previsiones de daños causados por desastres naturales, según explicó el ministerio de Ciencia.

Así que, como vemos, la carrera por la supercomputadora del exaflop de operaciones ha comenzado… hagan sus apuestas, señores.