La red social pretende agregar elementos de “contexto” a tuits considerados abusivos, pero que son de interés común real. Mensajes que pueden provenir de una figura pública, como el presidente de EE.UU.

Lejos de suprimirlos del todo, la red social Twitter planea agregar elementos de “contexto” a algunos tuits que violan sus reglas de uso, pero que la misma empresa puede estimar que pueden ser de interés público como los publicados por figuras políticas, como Donald Trump.

La plataforma es utilizada habitualmente, por el presidente estadounidense y otras figuras públicas, para lanzar todo tipo de comentarios, algunos de ellos incendiarios. En esa línea, Twitter dijo que está explorando formas de agregar contexto a los tuits considerados de interés público legítimo, pero que violan sus términos de servicio.

“Twitter está explorando formas de proporcionar más contexto en torno a los tuits que violan nuestras reglas, pero que son noticiosos y de interés público legítimo”, dijo la compañía en un comunicado.

Un día antes, la jefa de seguridad de Twitter, Vijaya Gadde, hizo comentarios similares al ser preguntada sobre tuits abusivos que pueden provenir de una figura pública como Trump.

Gadde dijo en una entrevista, durante un foro de tecnología del Washington Post en San Francisco, que Twitter está buscando formas de “poner un poco de contexto a su alrededor para que las personas estén conscientes de que ese contenido es realmente una violación de nuestras reglas y cumple una función particular al permanecer en la plataforma”.

Los tuits que van demasiado lejos, como amenazar a alguien con violencia, serán eliminados sin importar quién los publique, según Gadde. Twitter y otras plataformas en línea han enfrentado presiones para eliminar contenido abusivo y promotor de odio, mientras evitan las críticas de actuar bajo un sesgo político.

A principios de este mes, Donald Trump incrementó las críticas de sesgo político a las firmas tecnológicas en un nuevo ataque a Silicon Valley después de que uno de sus aliados clave en el Congreso demandara a Twitter, acusándolo de discriminar a los conservadores.

Twitter y otras compañías han negado vigorosamente las críticas de sesgo político en sus plataformas. La cuenta de Trump en Twitter tiene casi 60 millones de seguidores.