La empresa aseguró haber tomado medidas disciplinarias contra Josh Mohrer, quien utilizó la aplicación para seguir a una reportera.
Hace solamente unas semanas, Buzzfeed detonó un pésimo momento para la exitosa aplicación de taxis Uber, que todavía no deja de repercutir en la compañía. Este episodio comenzó con el reporte de una periodista de la web estadounidense, quien aseguró que un miembro de la startup la había seguido por medio de la aplicación, accediendo a datos que, se supone, no deberían estar al alcance de ejecutivos de la compañía.
El principal responsable de todo este incidente fue Josh Mohrer, encargado de la división de la empresa en Nueva York, quien explicó en su minuto que había seguido a la periodista porque solamente quería “encontrarse con ella justo antes de que llegara a su oficina”. Sin embargo, al parecer los dueños de la aplicación no pensaron lo mismo.
La empresa aseguró durante este lunes que “ya ha tomado las medidas disciplinarias contra Moher por sus acciones, luego de una investigación detallada de los hechos”, sin revelar ni cuáles serán las medidas contra el ejecutivo ni tampoco anunciando su desvinculación con la compañía.
A pesar de estas medidas, Uber todavía se mantiene en el ojo del huracán especialmente por la seguridad de sus servicios. Todavía queda en duda si la empresa accede normalmente a “God View”, la aplicación que habría usado Mohrer para seguir a la periodista, y especialmente, quienes son los que pueden utilizarla.
Además, sin contar este conflicto, todavía queda en duda cuáles serán las medidas de la empresa frente al segundo escándalo que los sacudió en noviembre: la amenaza de uno de sus ejecutivos de liberar los datos de periodistas que hablaran mal de Uber.