Conversamos con el creador de una de las aplicaciones más populares del mundo, quien nos comentó desde su mayor error como emprendedor hasta su opinión sobre el concepto de éxito.
Waze, la popular aplicación para conductores, solamente lleva ocho años en nuestra vida. No obstante, se ha vuelto una herramienta vital en la vida de muchas personas hoy en día. Por medio de su éxito, el ingeniero detrás de este servicio, Uri Levine, se ha vuelto uno de los actores claves en el mundo del emprendimiento actual, especialmente en Israel, un ecosistema de innovación que se vio sumamente beneficiado por el éxito de esta app y hoy promete convertirse en el próximo "Silicon Valley".
Para conocer un poco más de su visión de Latinoamérica y el mercado de startups, en AETecno conversamos con Levine durante el evento Entel Summit 2016 en Chile, encuentro en el que nos comentó desde su mayor fracaso como emprendedor hasta la misión que mueve cada uno de sus proyectos, de Waze a su actual iniciativa Feex, un proyecto que busca eliminar comisiones abusivas y ahorrarle cientos de dólares a sus usuarios.
- ¿Qué podemos aprender como región del ecosistema de emprendimiento de Israel?
Creo que hay algunas cosas que se pueden hacer para que la región crezca como fuente de emprendimientos y startups. Una parte ya está en desarrollo, por ejemplo en Chile, donde hay una gran inversión del gobierno en esta área. Creo que eso es un gran comienzo.
Lo que probablemente falta, y que es bastante importante, es el rol de la prensa para cambiar la noción de temor al error. Muchos son visto como superhéroes, pero no es necesario esto para ser exitoso. Es necesario que se cuente la realidad de más tipos de startups, más variadas y sus historias reales como también su misión. Así se puede motivar más y más gente, y jóvenes, a convertirse en emprendedores y tener menos miedo al error.
El tercer punto que creo que es vital es el aprendizaje de inglés. Eso es algo vital en la industria, y que probablemente va a tomar décadas en cambiar, porque requiere mejorar la educación en todos sus niveles. Esto permitirá una mejor perspectiva en el área de la innovación. Solamente con estos tres pasos, ya comienza a crearse la infraestructura de un ecosistema de emprendedores y un buen futuro para Latinoamérica.
Sigo equivocándome todos los días y es perfectamente normal.
- ¿Cuál fue tu mayor fracaso como emprendedor y qué aprendiste de esa experiencia?
Sigo equivocándome todos los días y es perfectamente normal. Quizás mi mayor error fue invertir en una startup en la que creía, pero en la que su CEO no era exitoso y no quería escuchar mis consejos. Creo que eso puede llegar a ser un gran problema, así que lo que aprendí es que no debo trabajar con directores ejecutivos que no acepten que quizás no están haciendo un buen trabajo y deberían encontrar un reemplazo para su puesto.
Otro caso fue una startup que comencé en 2010 y que se basaba en un tipo de comportamiento específico, que finalmente no era real. En cuanto nos dimos cuenta de eso, re enfocamos el proyecto y mejoramos este problema.
- ¿Cuál es tu opinión de la startups unicornio y cómo podría afectar al ecosistema emprendedor?
Obviamente sí, porque existe una idea que entre mayor es la ganancia, mayor es el éxito del negocio. Esto se ha vuelto cada vez más interesante para emprendedores, especialmente los más jóvenes. Pero el objetivo no debería ser este, sino que cambiar el mundo y hacerlo un mejor lugar. Todos probablemente pensamos en el éxito todo el tiempo, pero deberíamos darle este giro al concepto reflexionando sobre cómo podríamos mejorar el mundo si logramos que una startup sea exitosa.
- ¿Es este pensamiento el que te ha motivado en todos tus proyectos?
Todas mis startups buscan crear un mundo mejor con su éxito. Obviamente para nosotros como consumidores, algunos negocios no son tan afortunados con su llegada disruptiva (risas).
