Estas bebidas pueden aportar de diferentes formas, como al momento de prevenir el resfrío, la gripe y más enfermedades.
Cuando vamos al supermercado, en la sección de lácteos muchas veces podemos encontrar bebestibles que vienen en formato similar al yogurt y que dicen ser probióticos.
¿Te has preguntado qué significa eso? Te contamos que este tipo de alimentos se caracteriza porque contienen microorganismos vivos que mejoran las bacterias “buenas” (microbiota normal) de nuestro organismo, lo cual puede ayudar a fortalecer nuestras defensas y facilitar la digestión, indica la clínica estadounidense Mayo.
Los tipos de bacterias más utilizadas en estos productos son los lactobacilos y las bifidobacterias, las cuales no sólo podemos ingerir desde alimentos fortalecidos, sino que también todos las tenemos en nuestros intestinos, señala el portal enciclopédico MedlinePlus.
Algunos de los beneficios específicos para la salud que las bifidobacterias nos entregan son combatir la diarrea, el estreñimiento y el síndrome de colon irritable.
Asimismo, pueden ayudarnos a prevenir el resfrío, la gripe y más enfermedades, gracias a su efecto sobre el sistema inmune.
Por su parte, los lactobacilos nos entregan aportes similares a las bifidobacterias, y además son usados para tratar trastornos de la piel, como los herpes labiales o fuegos, las aftas, el acné, el eczema (dermatitis alérgica), sensibilidad a la exposición solar (erupción polimorfa lumínica), sensibilidad a los alérgenos del ambiente, y rinitis alérgica en bebés y niños, de acuerdo a MedlinePlus.
Eso sí, antes de usar probióticos para tratar alguna enfermedad en particular, te recomendamos consultar con un médico.