Poco más de cincuenta años después que su conformación definitiva comenzara a dar los primeros pasos hacia el éxito mundial, su ciudad natal –Liverpool- inaugura un atractivo monumento al cuarteto Los Beatles.

 

Luciendo un carácter tranquilo, elegantemente vestidos, caminando y conversando, la imagen de la obra de más de dos metros de alto no obedece a una habitual estampa de una estatua.

Con un peso levemente superior a las dos toneladas, la amable mole de bronce hace un nuevo guiño hacia la posteridad del grupo compuesto por Ringo Star, George Harrison, John Lennon y Paul McCartney. Sonrientes, las figuras jóvenes de Los Beatles se ubican en la rivera del río Mersey.

 

El monumento es una creación del artista local Andy Edwards y rememora las cinco décadas del último concierto dado en esa ciudad por el hoy universalmente conocido cuarteto.

El artista que dio vida a la atractiva estatua señala que no tiene dudas en que la obra “se convertirá en un lugar ritual, un espacio en el que se piense, medite y toque música”.

 

El monumento se inauguró este viernes 4 de diciembre y contó con la presencia de la hermana de John Lennon, Julia Baird, quien subrayó que “se trata de una muy buena forma de honrar a unos destacados representantes de esta ciudad”.