En la nueva producción del clásico de terror, el muñeco es un juguete que opera con inteligencia artificial.
Desde su debut en 1988, el muñeco diabólico Chucky se ganó un lugar en el panteón de los grandes asesinos del cine de terror, junto a Freddy Kruger, Jason Voorhes y Mike Myers. El muñeco Good Boy poseído por el espíritu de un asesino serial apareció por primera vez en los cines hace treinta años y desde entonces protagonizó siete películas, ganando en el camino una novia, un hijo y hasta un culto dedicado a su figura.
Pero se decidió que el muñeco pelirrojo necesitaba un lavado de cara y este año, cuando se estrenará película sobre el personaje, se empezará un relato que incluye a una nueva versión de Chucky, que acaba de revelarse al mundo. De hecho, la primera imagen publicada se muestra después de que ya se haya presentado un avance de la película.
La película se estrenará en Uruguay el próximo 25 de julio, con el título El muñeco diabólico, y en esta nueva versión, Chucky ya no está poseído, sino que en realidad es un juguete de alta tecnología, que opera con inteligencia artificial. Aunque como es previsible, el sistema falla, y el muñeco se convierte en un asesino imparable.
La versión 2019 de Chucky es un muñeco inteligente llamado Buddi, que es regalado a un niño por su madre, pero que acaba desatando el pánico. La voz del personaje (en la versión en inglés), está a cargo de Mark Hamill, que se hizo conocido interpretando a Luke Skywalker en la saga Star Wars, pero que ha centrado su carrera sobre todo en su labor como actor de voz: ha sido el Guasón en series animadas y videojuegos de Batman, y trabajado en múltiples películas y dibujos animados en ese rol.