Xinhua. Uno de cada seis niños australianos no vacunados se les está negando el tratamiento médico de los médicos por temor a que potencialmente puedan infectar a otras personas con enfermedades prevenibles, según una encuesta nacional.

La Encuesta Australiana de Salud Infantil hizo 2.000 preguntas a los padres sobre la salud de sus hijos, y se encontró que uno de cada seis fue rechazado para tratamiento.

El presidente de la Asociación Médica Australiana, Michael Gannon, dijo a Fairfax Media que era una preocupación que a los niños se les negara el cuidado de la salud, pero admitió que era responsabilidad de los padres del niño asegurarse de que las vacunas estuvieran actualizadas.

"Estaría muy decepcionado si ese es el caso", señaló  Gannon. "No importa cuáles sean las reservas que un doctor pueda tener, no es ético negar el cuidado a un niño no vacunado".

El estudio también mostró que mientras el 95% de los niños estaban al día con las vacunas, uno de cada 10 padres eran de la creencia de que las vacunas eran una causa contribuyente a autismo a pesar de la evidencia médica sugiriendo lo contrario.

Tres cuartas partes de los padres dijeron que se les debe informar si hay niños no vacunados que asisten a la escuela de sus hijos, mientras que el 70% de los padres dijeron que considerarían enviar a sus hijos a una escuela diferente si se les negara esa información.

Los resultados del estudio se produjeron después de que el gobierno introdujo el año pasado la política de "no jab, no pay", que retiene el bienestar y otros subsidios gubernamentales de los padres que no vacunan a sus hijos.